¿Tendrá eco en Ecuador el llamado del Papa a abandonar la violencia? Aquí la pregunta disparadora desde Aleteia luego de que Francisco expresara durante el rezo del Ángelus preocupación por la situación de Ecuador y llamara a las partes a abandonar la violencia.
Por lo pronto, como paso que genera esperanza a pesar de que persiste la crisis, las partes empezaron a dialogar este lunes 27 de junio (un reclamo –como único camino para solución- que tuvo a la Iglesia como protagonista desde el inicio de las protestas).
En efecto, esta primera instancia sucedió en la Basílica del Voto Nacional de Quito y un cuadro del Sagrado Corazón emergió como “testigo” de un diálogo tan anhelado, tal cual se distingue a través de las imágenes de agencias y medios de comunicación.
Un camino aún con dificultades
La mesa de diálogo que se conformó, que tiene a la Iglesia entre sus integrantes, aún debe caminar por un camino de dificultades. A pesar del anuncio de la baja en el precio de los combustibles, las medidas reclamadas desde el mayor movimiento indígena del país, la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), van más allá e incluyen otros aspectos (“10 puntos”) que van desde educación hasta seguridad.
Las partes tenían previsto volver a encontrarse este martes. Mientras tanto, a nivel político, la Asamblea Nacional volvía a discutir este 28 de junio la destitución del presidente Guillermo Lasso.
El rol de la Iglesia y un nuevo pedido de paz
Desde que comenzaron las protestas el pasado 13 de junio en Ecuador han sido varias las intervenciones que se han dado a través de la Iglesia. Además del pedido del diálogo, la propia Conferencia Episcopal Ecuatoriana llamó a unatreguala semana pasada a través de una rueda de prensa.
Pero también ha emitido en la noche del viernes, solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, un mensaje con énfasis en la “justicia social como meta” y “el respeto al orden constituido, el camino”.
En las últimas horas, desde la Arquidiócesis de Quito surgió un nuevo comunicado titulado “¡Camino de perdón… Camino de paz!” y firmado por el arzobispo Alfredo Espinoza Mateus.
“Jamás pensé que casi tres años después tendríamos que volver a escribir un nuevo llamado a encontrar el camino del perdón”, comienza diciendo el arzobispo en su mensaje. Luego de hacer referencia a la violencia desatada en los últimos días, prosigue en otro pasaje:
“¿Estamos dispuestos a sentarnos a escucharnos como hermanos? ¿Estamos dispuestos realmente a dialogar buscando el bien común? ¿Abrimos nuestro corazón al otro y lo vemos como un verdadero hermano? ¿Queremos construir esta sociedad justa y fraterna?”.