«¡Viva san Isidro!, ¡viva santa María de la Cabeza!, ¡viva el matrimonio santo!». Así han gritado, a una sola voz, los numerosos fieles que abarrotaban la catedral de Santa María la Real de la Almudena este sábado, 28 de mayo, por la mañana al concluir la histórica Misa con el cuerpo del patrón de Madrid.
Además de la Real Congregación de San Isidro de Naturales de Madrid, en la celebración han estado presentes más de 40 cofradías de san Isidro de la comunidad, de numerosos pueblos de España y de otros lugares del mundo como Luxemburgo o Múnich (Alemania).
El arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, ha valorado su presencia y que en tantos sitios se multipliquen las parroquias y las ermitas en honor a san Isidro o que incluso haya tierras, como ocurre en Argentina, con su nombre. El labrador, ha aseverado, «les sigue reuniendo para vivir la fe y para experimentar la cercanía de Jesucristo Nuestro Señor a sus vidas».
Carta del cardenal Marx
Para ilustrarlo, el purpurado ha leído una carta en la que el arzobispo de Múnich y Frisinga, cardenal Reinhard Marx, desea un jubileo «lleno de bendiciones» y alienta a ser «testigos de Cristo» como lo fueron el patrón de Madrid y su mujer, santa María de la Cabeza: «Nos ofrecieron un paradigma luminoso de convivencia cristiana […]. Precisamente en los tiempos que corren, con las consecuencias económicas y sociales de la pandemia del coronavirus y las consecuencias atroces de la cruel guerra en Ucrania, el ejemplo de su santo patrón debería impulsarnos a convivir unidos con nuestros semejantes independientemente de su origen social, etnia y religión».
Aludiendo ya al salmo 46 –«Dios es el rey del mundo»–, el arzobispo de Madrid ha incidido en que san Isidro animaba a otros a aclamar a Dios. «En el fondo del corazón humano hay un deseo inmenso de encontrarse con Dios y no solo un deseo, es una necesidad del ser humano. Si no le proponemos a Dios, que es liberador de todas las esclavitudes, nos uniremos a otros dioses diferentes que no esclavizan y que nos tienen maniatados, sin descubrir de verdad que somos hijos de Dios y que somos hermanos de todos los hombres», ha detallado.
Con la vista puesta en el Evangelio proclamado, ha señalado que el patrón de Madrid «no perdió nunca el entusiasmo» por Jesucristo y quiso contagiarlo a los demás «no ya por sus palabras elocuentes, sino por la vida que tenía» en ámbitos como su trabajo y su familia o «acogiendo a todo el que llegaba a él para entregarle lo mejor que tenía». «¿No necesitamos en estos momentos de la vida y de la historia entusiasmo también?», ha preguntado, remarcando que hay una «crisis de familia» y un «cuestionamiento de la vida del ser humano en todos los aspectos».
En esta línea, el arzobispo de Madrid ha concluido su homilía con una invitación a pedir y a creer porque «el Señor no nos deja abandonados, el Señor nos atiende, el Señor nos cuida, el Señor nos ama». Junto a él han concelebrado los obispos auxiliares, monseñor Juan Antonio Martínez Camino, SJ, monseñor José Cobo y monseñor Jesús Vidal; vicarios episcopales; el Cabildo, y el delegado episcopal para las Causas de los Santos, Alberto Fernández, entre otros.
Clausura del arca
Tras la Misa junto a la Virgen de la Almudena –a la que el patrón de Madrid tenía gran devoción– ha tenido lugar una procesión con el cuerpo incorrupto, con bailes regionales en la plaza Mayor. El destino final ha sido la colegiata, donde se custodia el cuerpo y adonde miles de fieles se han acercado estos días para venerarlo.
Este domingo, 29 de mayo, habrá una Misa del peregrino a las 12:00 horas y por la tarde, a las 18:00 horas, habrá vísperas, tras las que se procederá a la solemne clausura del arca de san Isidro, que no se abría desde 1985.
Web del jubileo
Coincidiendo con la exposición del cuerpo incorrupto del patrón de Madrid, Medios del Arzobispado ha puesto en marcha un nuevo apartado en la web diocesana en el que se incluyen las celebraciones programadas, noticias, fotografías y vídeos, artículos y otros materiales. Para visitarla se puede usar el dominio jubileosanisidro.archimadrid.es.