Tony Gratacós, periodista y escritor, trabaja en el mundo audiovisual y pensaba trabajar en este proyecto desde fuera y no desde dentro, desde la parte técnica pero no como actor improvisado. Cuando se lo propusieron, hace ya 4 años, no dudó en dar su testimonio sobre lo que para él es la vida central del Cristiano.
Cómo surge la idea
Se lo propuso el sacerdote José Pedro Manglano y más adelante con el empujón de Pietro Ditano, director de este proyecto, Tony aceptó sin pensarlo.
Cómo explicar la comunión
Tony cuenta que al salir de misa, una tarde de verano observó como su sobrino, Juan, no había comulgado. Le preguntó por qué y este le dijo: cuando comulgo no siento nada. Entonces Tony le animó a confesarse y a hacerlo. Le puso un ejemplo brillante.
Tony le dijo a Juan que cuando él era pequeño y su madre le daba un biberón seguro que tampoco sentía nada, pero que cada uno de esos biberones que su madre preparaba y le daba le ayudaban a crecer.
Comerte a Dios
Comerte a Dios nos ayuda a crecer como cristianos y nos conecta más con Dios. Saca lo mejor de nosotros mismos. Es la explicación que da Tony a este momento. Ahora, a pocos días de haber celebrado la Semana Santa Tony explica que Jesucristo se hizo hombre e instituyó la Santa Cena para convertirse en pan, comerlo y así permitirnos ascender y llegar al cielo.
Objetivo de la película
Con este proyecto se intentan romper muchos moldes. Se busca contar La Misa de otra forma. Salir del estándar de considerar La Misa un rollo. El documental, que está narrado por el actor Eduardo Verástegui, cuenta con testimonios del propio padre Manglano, fundador de Hakuna, del actor Pietro Sarubbi que interpreta a Barrabás en La Pasión de Cristo y del bicampeón de Formula 1 Emerson Fittipaldi entre otros. Cuenta además con la música del tenor italiano Andrea Bocelli.
Inquietud para buscar
Tony Gratacós se la recomienda sobre todo a quien tenga una inquietud. Sienta que dentro de él hay algo que le inquieta, que le mueve. Para toda esa gente que no va a misa pero tienen algo que les mueve a pensar que a lo mejor se están perdiendo algo por no ir. La Misa, el beso de Dios es para Tony el empujón que alguno puede necesitar para volver a encontrarse con Cristo y caminar junto a él.