El cardenal Peter Turkson, que acaba de ser nombrado canciller de la Academia Pontificia de las Ciencias y de la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales, abrió la presentación de la iniciativa en el Colegio Teutónico de la Ciudad del Vaticano el 7 de abril.
El cardenal ghanés explicó cómo esta iniciativa responde a una preocupación del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede; él mismo presidió esta institución hasta diciembre de 2021.
Una necesidad de los inversores
De hecho, explicó el cardenal, es necesario "ayudar a los inversores ofreciéndoles una orientación coherente con la fe y con la doctrina social de la Iglesia". Lo dijo durante el acto, al que asistieron más de 60 representantes del mundo financiero
"Hay una gran necesidad de determinar, formular, descubrir, discernir los valores" que deben tenerse en cuenta en el mundo de la inversión financiera, insistió.
El criterio fundamental
"Los valores son valores en cuanto están en relación con algo", aclaró. "Los valores son tales en la medida en que promueven la plena realización de la dignidad de cada persona".
Y, para la doctrina social de la Iglesia, subrayó, "el gran valor, la dignidad de la persona, tiene su origen en el hecho de que toda persona humana ha sido creada a imagen y semejanza de Dios. De ahí surge el sentido de la dignidad de cada persona".
El objetivo de los instrumentos de inversión financiera, concluyó, debe ser "promover la dignidad de cada persona, de todos, es decir, el bien común".
El objetivo
La concepción y el diseño de “Values’ Metrics” constituyen el resultado de la colaboración entre el fondo de inversión Fon.Te; la Federación para la Economía del Bien Común; PwC; Anima sgr, y la asociación Core Values.
Maurizio Grifoni, presidente de Fon.Te, un fondo de pensiones para empleados de empresas italianas del sector servicios, explicó durante la presentación en el Vaticano, que el mundo de las finanzas, ante los dramas ecológicos, los efectos de la pandemia y el miedo suscitado por la guerra de Ucrania, entiende cada vez más que "debe redescubrir su capacidad regenerativa, no especulativa. Debe contribuir a crear una economía del bien común".
Pero en este objetivo, explicó, los criterios ESG son diferentes entre sí, a veces contradictorios, lo que crea mucha confusión y a veces "greenwashing", una estrategia de comunicación de ciertas empresas destinada a construir una imagen engañosamente positiva en términos de impacto medioambiental.
Según Grifoni, " Values’ Metrics pretende proporcionar a las finanzas internacionales y a sus inversores un criterio de evaluación para crear una nueva economía”.
“Las inversiones --subrayó Grifoni, uno de los inversores institucionales más influyentes en Italia-- deben tener en cuenta no solo los beneficios, sino también el impacto social y medioambiental, con el fin de promover un modelo de desarrollo verdaderamente sostenible, en línea con los principios que salvaguardan el bien común, hacia una ecología integral".
En la presentación, a la que asistió Aleteia, Paolo Bersani, socio de Pwc Italia, explicó que "es necesario dar referencias concretas a las empresas y a los empresarios para que comprendan cómo hacer negocios protegiendo el bien común, y para ello pueden inspirarse en las encíclicas del Papa".
El sacerdote Philip Larrey, decano de Filosofía de la Universidad Pontificia Lateranense, subrayó la necesidad de que las empresas que cotizan en bolsa se ocupen del bienestar integral del hombre, de la sociedad y del medio ambiente, certificando este compromiso mediante métricas adecuadas.