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Hay temas en la Iglesia de los que poco hablamos. Ojalá nuestros sacerdotes los trataran con más frecuencia.
Uno de ellos es la bellísima devoción al Sagrado Corazón de Jesús, muy unida al Inmaculado Corazón de María.
Suelo contarte historias de mi infancia. ¡Quién no conserva esos bellos recuerdos que marcaron nuestras vidas!
Sobre todo, los que tuvieron la oportunidad de pasar algunos días en casa de sus abuelos, siendo niños...
En mi caso, solíamos ir a Costa Rica a pasar las vacaciones del verano en casa de mi abuela “Mamita”.
Era una casona de madera grande de dos pisos y muchas habitaciones, en el barrio la Dolorosa de san José.
Bajando las escaleras, colgaba sobre la pared del fondo un enorme cuadro de Jesús que mostraba su Corazón ardiente y tenía una mano sobre este.
Es un cuadro antiguo del Sagrado Corazón de Jesús, que he vuelto a ver en las casas de algunos abuelitos.
Luego, en la escuela, las monjas franciscanas nos relataron la historia de santa Margarita María.
Me sorprendí cuando escuché el nombre del sacerdote que Jesús le envió para ayudarla, Padre Claudio La Colombiere.
Cuando leí sobre las apariciones de Jesús a santa Margarita María Alacoque en 1673, una frase en particular me golpeó el corazón.
Jesús se quejaba de nuestra ingratitud y la forma despectiva como las personas responden a su amor por la humanidad y de pronto:
Qué dolor tan profundo he sentido. Por eso procuro consolarlo y visitarlo a menudo en el sagrario, para que sepa que lo amamos y estamos agradecidos por tanto amor.
Los católicos debemos formarnos más en nuestra fe y conocer esta hermosa devoción llegada de la mano del mismo Jesús, para ayudar a la salvación de las almas, en la que nos pide pureza, perfección, y una respuesta de amor a su Amor.
¿Conoces las 12 promesas que dejó Jesús para los devotos de su Sagrado Corazón? Te las comparto.
Es importante que todos las conozcan y compartirlas una y otra vez. Traté de elegir mi favorita, pero todas los son.
1. A las almas consagradas a mi Corazón, les daré las gracias necesarias para su estado.
2. Daré la paz a las familias.
3. Las consolaré en todas sus aflicciones.
4. Seré su amparo y refugio seguro durante la vida, y principalmente en la hora de la muerte.
5. Derramaré bendiciones abundantes sobre sus empresas.
6. Los pecadores hallarán en mi Corazón la fuente y el océano infinito de la misericordia.
7. Las almas tibias se harán fervorosas.
8. Las almas fervorosas se elevarán rápidamente a gran perfección.
9. Bendeciré las casas en que la imagen de mi Sagrado Corazón esté expuesta y sea honrada.
10.Daré a los sacerdotes la gracia de mover los corazones empedernidos.
11. Las personas que propaguen esta devoción, tendrán escrito su nombre en mi Corazón y jamás será borrado de él.
12. A todos los que comulguen nueve primeros viernes de mes continuos, el amor omnipotente de mi Corazón les concederá la gracia de la perseverancia final.
Acércate confiado al Sagrado Corazón de Jesús y tu vida cambiará.
¡Ánimo!