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La preocupación del Papa en Navidad por dos países azotados por la guerra y la tragedia

Pope Francis General Audience
Ary Waldir Ramos Díaz - publicado el 24/12/20

El papa Francisco considera la Navidad contemplar el nacimiento de Jesús al lado de los que necesitan y son frágiles. Y promete, a su debido tiempo, dos nuevas visitas apostólicas. Luego de anunciar oficialmente su viaje a Iraq en 2021. El papa Francisco ha anticipado de alguna manera hoy su mensaje de Navidad cuando dará la bendición «Urbi et Orbi» sin público y de puertas para adentro este año 2020. Francisco ha enviado hoy, 23 de diciembre, dos mensajes navideños significativos por la paz del Líbano y Sudán del Sur. 

Quiere visitar Líbano y Sudán del Sur

El Papa prometió visitar Líbano y Sudán del Sur, apenas le será posible y a su debido tiempo. Cabe recordar que su primer viaje apostólico oficial anunciado, tras el confinamiento obligatorio por la pandemia, es Iraq en el mes de marzo 2021. 

Por otro lado, el Papa también rememoró la guerra civil que vive Sudán del Sur y prometió visitar el país, una vez se firme la paz definitiva. También hizo un llamamiento a sus líderes políticos para que continúen con el deseo de proseguir con el camino de la implementación fluida del Acuerdo de Paz. 

Mensaje navideño a los líderes del país

En este contexto, el Papa reiteró su deseo de visitar la nación africana, mientras las cosas vuelven a la normalidad en el contexto de  “los compromisos hechos en el Vaticano en abril de 2019” al respecto.

Así, Francisco envío un mensaje navideño a los líderes del país, firmado junto con  el Arzobispo de Cantebury, Justín Welby y del moderador de la Iglesia de Escocía, Martin Fair.



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Sudán del Sur, progreso no suficiente

“Nos alegra ver el pequeño progreso que han hecho, pero sabemos que no es suficiente para que su pueblo sienta el efecto total de la paz. Cuando lo visitemos, anhelamos ser testigos de una nación cambiada, gobernada por líderes que, en palabras del Santo Padre el año pasado, “se tomen de la mano, unidos… como simples ciudadanos” para “convertirse en Padres (y Madres) de la Nación”.

“Rezamos, esta Navidad, para que reconozcan una mayor confianza entre ustedes y una mayor generosidad en el servicio a su pueblo. Rezamos para que conozcan la paz que sobrepasa el entendimiento en sus propios corazones y en el corazón de su gran nación (Filipenses 4:7)”, firman Francisco, Justin Welby y Martin Fair la carta dirigida a los líderes sudaneses.

Líbano 

Por otro lado, en su carta al Líbano publicada hoy también, el Papa exhortó a la Comunidad Internacional a no dejar solo al pueblo de esa nación de Oriente Próximo.  “Ayudemos al Líbano a mantenerse al margen de los conflictos y las tensiones regionales. Ayudémosla a salir de su grave crisis y a recuperarse”, pidió Francisco.

Amados hijos e hijas del Líbano, grande es mi dolor al ver el sufrimiento y la angustia que sofoca la ingeniosidad y la vivacidad innatas de la Tierra de los Cedros”, así inicia la carta navideña del Papa dirigida al cardenal Béchara Boutros Raï, Patriarca de Antioquia de los Maronitas y al pueblo libanés. 

Participa en las alegrías y las penas

Francisco adolorado constató ver “secuestradas todas las esperanzas más queridas de vivir en paz” del Líbano, y, para el país de Oriente Próximo seguir siendo “para el mundo un mensaje de libertad y un testimonio de buena convivencia” entre cristianos (41%) y la mayoría árabe-musulmana (59%).

El Papa manifestó que participa de corazón en todas las alegrías, pero también en las penas del pueblo libanés: “siento en mi corazón la gravedad de vuestras pérdidas, sobre todo cuando pienso en los numerosos jóvenes que se ven privados de toda esperanza de un futuro mejor”.

Penumbra 

Pero en este día de Navidad, Francisco les habló de confianza: “el pueblo que caminaba en la noche divisó una luz grande (Is 9, 1), la luz que mitiga los temores e infunde esperanza a todos en la certeza de que la Providencia nunca abandonará el Líbano y sabrá convertir incluso este luto en bien”. 

Recordó que el Líbano es mencionado muchas veces en la Sagrada Escritura, pero la imagen que nos da el salmista sobresale por encima de todas las demás: “El justo florecerá como la palmera, crecerá como el cedro del Líbano” (Salmo 91:13). 

La belleza del cedro

La belleza del cedro en la Biblia es un símbolo de firmeza, estabilidad y protección. Por eso, el Papa invitó al país, como el cedro, a ser resistente a toda tempestad. Que su población entienda “las contingencias del momento presente para redescubrir su identidad”. La de llevar al mundo entero “la fragancia de Dios”.

 La estrella de Belén

“Queridos hijos e hijas, en la oscuridad de la noche levantad vuestra mirada, que la estrella de Belén sea vuestra guía y vuestro estímulo para entrar en la lógica de Dios. Para no perder el camino y no perder la esperanza de la convivencia y el pluralismo, la esperanza de un pueblo que no abandona sus casas y su patrimonio; la identidad de un pueblo que no destruye el sueño de los que creían en el futuro….”, escribió el Papa. 

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