El compositor Tony Alonso espera que la música “haga que la gente se mueva”Un profesor de la Universidad de Emory ha compuesto un álbum de himnos católicos que ha sido nominado a los Grammy Latinos en la categoría de Mejor Álbum Cristiano. Los Grammy serán otorgados el próximo 19 de noviembre.
La obra, Caminemos con Jesús, inyecta elementos tradicionales cubanos en los himnos católicos en un estilo que combina letras en español e inglés, conocido como “son Cubano”.
The Catholic Herald reporta que Tony Alonso, de 40 años, ha compuesto más de 20 colecciones de himnos católicos, pero que esta es su primera nominación al premio Grammy.
El compositor, que vive en en Atlanta, afirma que escribió el nuevo álbum para honrar sus propias raíces cubanas, que han marcado su fe católica.
Las 11 canciones del disco están ejecutadas por guitarras acústicas, coros, pianos, flautas y percusión tradicional cubana. Los ritmos que producen muestran que el “son Cubano” es una extensión del estilo de la salsa.
Alonso se rodeó de músicos excepcionales para la grabación del álbum, y cabe resaltar sus admirables solos de piano repartidos por toda la obra.
La Biblia y la música
En una entrevista con el Georgia Bulletin, recogida por el Catholic Herald, Alonso dijo de su nuevo trabajo:
“La Escritura está llena de mandatos bíblicos sobre cantar. Y esos mandatos no tienen excepciones. Veo que mi trabajo cumple con ese mandato”. El compositor agregó: “Espero ofrecer simplemente otra forma de alabar a Dios a través una canción junto a muchos otros. Estoy convencido de que Dios ama la variedad. Este álbum es una forma diferente de expresar la oración”.
Alonso es un músico de larga trayectoria, estudió música en la Northwestern University. Mientras obtenía su maestría en teología litúrgica en la Universidad Loyola Marymount, trabajó como director musical de la capilla de la escuela y luego obtuvo su doctorado en Emory.
Dijo que estudiar en Emory le ha dado la oportunidad de trabajar junto a cristianos de varias confesiones, y que trata de llevar estas influencias culturales a su música.
“Parte de la alegría de este proyecto fue imaginar nuevas formas de expresar textos antiguos”, dijo Alonso. “Creo que Dios habla a través del son [cubano] y la salsa tanto como a través de cualquier otra cosa. Espero que esto haga que la gente quiera moverse”.
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