separateurCreated with Sketch.

12 pasos para obtener algo de la humildad que necesita el mundo

WOMAN PRAYING,CHURCH PEWS
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Larry Peterson - publicado el 18/10/20
whatsappfacebooktwitter-xemailnative

Empecemos por nosotros mismos, pero recemos también por que todo el mundo crezca un poco en esta virtudMuchos miramos con consternación el ambiente tóxico en la política en general. ¿Cómo ha llegado el mundo a este punto? ¿Es que ya no hay nadie amable o con espíritu de cooperación? ¿Nadie honesto? ¿Nadie trabajador?

Últimamente, el mundo está falto de mucha más humildad y le sobra mucho orgullo, que está en la raíz de todos los vicios.

Uno de los grandes de la Iglesia, san Benito, propuso doce pasos para crecer en humildad.

El desarrollo de cada paso en sus escritos es extenso, así que aquí presentamos un resumen de cada uno.

San Benito empezó su lista con este prefacio:

“Todo el que se ensalza será humillado y el que se humilla será ensalzado” (Lucas 14,11).

Paso 1: Temer al Señor

El hombre debe mantener siempre delante de los ojos el temor de Dios, y nunca olvidar Sus mandamientos. Temer a Dios significa tener reverencia hacia Dios; lo que olvidamos a menudo es que, al ofender a Dios, nos ofendemos a nosotros mismos.

Paso 2: No mi voluntad, sino la tuya, Señor (de Juan 6,38) 

Esto significa que, para ser humildes, debemos evitar poner un placer excesivo en nuestra propia voluntad y deseos y, más bien, aspirar siempre a hacer la voluntad de Dios antes que nada.

Paso 3: “Se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte” (Filipenses 2,8)

La humildad requiere que seamos obedientes a la autoridad, que incluye a nuestros padres, nuestro sacerdote, las autoridades legítimas, etc.

Paso 4: Aceptar el sufrimiento paciente y obedientemente

“Porque él que quiera salvar su vida, la perderá; y el que pierda su vida a causa de mí, la encontrará” (Mateo 16,24-25).

Paso 5: Confesar nuestros pecados y faltas

Esto implica ir a confesar regularmente nuestros pecados a un sacerdote a través del sacramento de la Reconciliación.

Paso 6: Contentarse con la pequeñez

Deberíamos aceptar que somos pecadores y frágiles y que, en solitario, no somos gran cosa pero, ante Dios, tenemos un valor precioso, tanto que sufrió y murió por nosotros.

Paso 7: Entender nuestra mediocridad

“Me hizo bien sufrir la humillación, porque así aprendí tus preceptos” (Salmos 119,71-73).

Paso 8: Respetar la Regla 

Este precepto es para recordar a los benedictinos respetar la Regla de su Orden. Nos recuerda que hemos de mantener las normas de la Santa Madre Iglesia o incluso las resoluciones que nos hayamos propuesto nosotros mismos para mejorar.

Paso 9: Silencio y soledad

Deberíamos evitar hablar mal de los demás e intentar abrazar el silencio y la soledad siempre que Dios lo disponga así para nosotros.

Paso 10: Mantener la paz en momentos de risa

Esto nos atañe a la hora de reírnos y burlarnos de los demás, cosa que nunca deberíamos hacer.

Paso 11: Hablar con calma y modestia

Deberíamos entrenar nuestra lengua para que las palabras que pronunciemos sean ante todo agradables a Dios y nunca ofensivas.

Paso 12: Eterna humildad y mansedumbre

Deberíamos aspirar a vivir nuestras vidas, día y noche, aguantando cualquier problema o adversidad que experimentemos y, con ello, permitir que la bondad y la dulzura de Dios brillen a través de nosotros.

El cardenal Rafael Merry del Val fue secretario de Estado de la Santa Sede con el papa san Pío X. Él escribió las famosas Letanías de la Humildad.


Letanías de la humildad
Te puede interesar:
Letanías de la humildad escritas por un cardenal aristócrata

Recemos por que más personas abracen el don de la humildad, empezando por nosotros mismos, por supuesto. Nuestro mundo sin duda lo necesita.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.