Esta droga puede llegar accidentalmente a nuestros niños en forma de golosinas
La legalización de la marihuana o cannabis es un tema que hace un tiempo viene generando mucha polémica, y no es para menos. Y es que cada vez más países buscan legalizar el consumo de cannabis, algunos solo en forma de medicamentos, pero otros con fines recreativos.
Es por ello que me pareció importante tratar este tema ya que es una droga que se la puede encontrar cada vez más en el mercado en forma de comestibles.
Actualmente estos productos son consumidos incluso por personas que nunca han fumado cannabis, y también pueden llegar accidentalmente estos alimentos a nuestros niños y adolescentes. Por ejemplo, en forma de golosinas, como los ositos de goma con cannabis, o un simple “brownie mágico”.
Este es un problema al que debemos estar atentos, principalmente cuando se legaliza esta droga con fines recreativos, ya que enseguida se traslada a los alimentos.
Su uso en los comestibles para vender es hasta el momento ilegal, aun así, aparecen cada vez más tiendas de venta de alimentos con cannabis.
Hoy en día existen hasta tiendas gourmet en las que venden brownies, ositos de goma, chocolates, bombones, bebidas, aceites con cannabis, los cuales además los promocionan porque ofrecen supuestos beneficios a la salud, los cuales no están comprobados científicamente y por el contrario puede dañar nuestra salud.
Avanzan los países en su legalización
En América Latina al menos siete países han aprobado la marihuana con fines medicinales, y solo uno, Uruguay, legalizó su consumo con fines recreativos.
En Estados Unidos 30 estados legalizaron su uso medicinal y once su uso recreativo. En México solo está aprobado su uso medicinal, y Canadá legalizo completamente su uso hace poco tiempo.
Pero ya hay muchos más que están buscando su legalización.
En países donde ya es legal su consumo recreativo como por ejemplo Uruguay, Estados Unidos y Canadá, se establece que los adultos podrán llevar y compartir hasta 30 gramos de marihuana legal en público. También podrán cultivar hasta cuatro plantas en sus casas y preparar productos para comer para uso personal (no su venta).
Marihuana y sus peligros para la salud
La marihuana es un producto que deriva de la planta herbácea Cannabis sativa perteneciente a la familia Cannabaceae, y contiene más de ochenta compuestos químicos biológicamente activos, los más conocidos son el Tetrahidracannabinol (THC) y el Cannabidiol (CBD).
Según el método que se utilice para la transformación de la planta se puede producir hachís o marihuana. El hachís, por ejemplo, se obtiene al prensar la resina que produce la flor de esta planta, mientras que la marihuana se obtiene a partir de la mezcla de flores, hojas y pequeños tallos de la misma.
La planta de marihuana contiene varios niveles de THC, el compuesto que proporciona los efectos psicoactivos esperados por los consumidores “lo que te droga”.
El CBD, es una variante de la planta de cannabis que no produce los mismos efectos psicoactivos que la marihuana porque no contiene casi nada de THC.
Esto ha llevado a que se lo utilicen para hacer comestibles con CBD, lo que se ha convertido en una peligrosa tendencia en salud y bienestar, al punto que incluso los vendedores actúan de consejeros de salud. Recetan a las personas distintos alimentos para mejorar sus padecimientos como ansiedad, acné, depresión, enfermedades cardíacas y hasta como analgésico para pacientes con cáncer.
Pero a pesar de no tener efecto psicoactivo, el CBD tiene riesgos conocidos para las personas en general, los que pueden incluir: toxicidad hepática (daño), somnolencia extrema, interacciones perjudiciales con otros medicamentos.
En los niños estos efectos varían, ya que la droga se distribuye por todo su cuerpo (que es mucho menor que el del adulto), por lo que reciben una dosis mucho más alta y tiene un riesgo potencial más elevado. Cuando llegan a la emergencia por haber ingerido algún alimento o golosina accidentalmente con cannabis, los pediatras relatan que llegan confundidos, y con dificultades para respirar (diminución de la frecuencia respiratoria), requiriendo muchas veces cuidados intensivos.
Uso medicinal
Hasta el momento hay un solo medicamento recetado y aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), el cual sirve para tratar dos formas poco comunes y graves de epilepsia, pero no se ha aprobado ningún otro producto del CBD, y además hay muy poca información disponible sobre el CBD, incluyendo sus efectos sobre el cuerpo.
No obstante, también se ha visto que siendo una sustancia adictiva podría afectar a los individuos consumidores en aspectos como la función normal del sistema nervioso central y el proceso para la utilización de algunos nutrientes.
¿Cuál es la diferencia entre fumar y comer el cannabis?
Cuando se fuma cannabis primero la droga entra en los pulmones, luego al torrente sanguíneo y al cerebro casi sin ser metabolizado.
En cambio, esta droga en la comida absorbe menos cannabinoides, pero el cuerpo lo procesa de forma diferente y se vuelve más potente. Al ingerir un alimento con cannabis la droga va directamente al estómago, luego pasa al torrente sanguíneo y al hígado.
En el hígado se convierte en otro compuesto llamado 11-hidroxi-THC, el cual cruza la barrera hematoencefálica y la distribuye en forma más amplia y rápida.
El efecto en los comestibles demora entre media hora y dos horas en aparecer, pero luego dura entre 4 a 6 horas en el cuerpo, mucho más que el efecto que produce el cannabis fumado.
El hecho de absorberse más lento, puede tener un impacto más dramático, ya que la ansiedad por que aparezcan sus efectos, los hace comer más cantidad, lo que puede llevar a una intoxicación.
En los adultos las consecuencias que se han visto son ataques de pánico, y también se habla de ataques de ansiedad o taquicardia.
Los consumidores no conocen lo que comen
El cannabidiol (CBD) parece estar disponible en casi todas partes y que se comercializa como una variedad de productos que incluyen medicamentos, alimentos, suplementos alimenticios, cosméticos y productos veterinarios.
Los productos del CDB no han sido aprobados ni han sido sujetos a la evaluación de la FDA, se desconoce aún si son eficaces para tratar una enfermedad en particular como dicen o si tienen otros efectos en la salud.
Al momento de comprar un producto con cannabis no se sabe la cantidad máxima que se puede consumir para que no afecte a la salud, no hay control de calidad, porque se realizan en laboratorios ilegales por lo tanto se desconoce también si contiene trazas de componentes psicoactivos.
Del mismo modo que no se conoce la dosis adecuada, cómo pueden interactuar con otros medicamentos o alimentos, o si tienen efectos secundarios peligrosos u otras preocupaciones en cuanto a la seguridad.
Por consiguiente, los alimentos con cannabis son de calidad y seguridad desconocida, tampoco hay hasta el momento estudios científicos que avalen los beneficios que dicen tener.
Cuidemos nuestro cuerpo, siendo consumidores responsables, pensando cuidadosamente antes de exponernos a este tipo de drogas. Estemos atentos a lo que consumen nuestros hijos fuera de casa, ya que en ocasiones estas drogas se encuentran camufladas en alimentos de consumo común desde una galleta, un brownie o una golosina, de este modo evitar riesgos a la salud o su calidad de vida, así como las de los que nos rodean.
Y si quieren investigar más, les recomiendo ver en Netflix un capítulo de la serie-documental Rotten titulado “Comida para volar”