separateurCreated with Sketch.

Murió Kobe Bryant, la estrella NBA salvado por la fe y su familia

whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Esteban Pittaro - publicado el 26/01/20
whatsappfacebooktwitter-xemailnative

Aplaudido por su talento y querido por sus gestos y declaraciones. El mundo del deporte llora hoy su pérdida

El básquet mundial, y el deporte en general, está de luto. Kobe Bryant falleció en un accidente aéreo en un helicóptero privado. Junto a él otras ocho personas, entre ellas su hija de 13 años. Uno de los jugadores de baloncesto más importantes de todos los tiempos, un hombre tan aplaudido por su descollante talento y competitividad, como querido por sus gestos y declaraciones en todo el mundo, más allá de las fronteras NBA.

Cinco veces campeón de la NBA, top 5 entre los máximos anotadores de todos los tiempos, bicampeón olímpico, Bryant vivió de niño en Italia, acompañando la carrera deportiva de su padre, basquetbolista como él. Hablaba además de su lengua nativa el italiano y el español, y eran un hombre puente entre el básquet NBA y el mundo FIBA, cuyas reglas rigen en el resto del mundo.

Su condición de galáctico atraía la atención mediática sobre su vida privada, que no estuvo exenta de escándalos. A los 25 años, Bryant engañó a su esposa con una joven, quien además le acusó de abuso deshonesto. Criado en la fe católica, la Mamba Negra recordó tiempo después que en el medio de esa crisis un diálogo con un sacerdote le provocó un quiebre en su vida. “Me miró y me dijo: ‘¿Lo hiciste?’ (por los abusos). Y le dije: ‘Claro que no’. Entonces me preguntó: ‘¿Tienes un buen abogado?’.  Y yo le dije: ‘Sí, es un fenómeno’. Entonces simplemente me dijo: ‘Déjalo pasar. Ve para adelante. Dios no te va a dar nada que no puedas manejar, y está todo en sus manos ahora. Esto es algo que no puedes controlar. Así que déjalo pasar’. Y fue el momento de quiebre”.

Bryant se disculpó en público por su pésima conducta. Su mujer Vanessa estaba a su lado, dándole la mano, acariciándolo en su vergüenza. El matrimonio Bryant hablaba de su fe sin ocultarla. El mismo Bryant refería a su fe, la de su esposa, la de sus hijas, y aquel sacerdote, como el puntal para superar aquella crisis. Hubo otras, pero las superaron.



Te puede interesar:
El ejemplo de Kobe Bryant: por qué una familia santa no está hecha de ángeles

El matrimonio Bryant armó una fundación de apoyo a las comunidades empobrecidas, con las que trabajan desde la educación y la cultura.

La carrera de Bryant terminó en 2016, en un nivel altísimo para un deportista en el retiro. Sus éxitos no terminaron allí, ya que con un cortometraje en el que repasaba su vida confirmando su amor eterno por el básquet ganó en 2018 un premio Óscar.

Ganó todo en su vida, pero visiblemente nada más valioso que su familia, con la que se mostraba cotidianamente, con la que descubrió la redención cuando todo le parecía perdido. El hombre estuvo en la cima, cayó, se levantó, y volvió a la paz.

En paz: así estaba, así se mostraba estos últimos años, feliz, disfrutando de la vida y el deporte al que tanto le dio y al que le seguía dando. Por ejemplo, en el último Mundial de Básquet, reivindicando el valor del evento ecuménico cuando la gran mayoría de las estrellas NBA le daban la espalda.

Kobe Bryant falleció el 26 de enero de 2020. No es exagerado decir que su legado deportivo vivirá para siempre. El deportista se lo ganó. El hombre se lo merece.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.