Esperanza Ridruejo, Pitita, falleció ayer en Madrid a los 88 años. Mujer aristocrática y una de las grandes de la dama de la alta sociedad española, conmocionó a la opinión pública al revelar en 1987 que tenía apariciones marianas.
Toda una vida plena de actividad. Se casó con Mike Stilianopoulos y durante años vivió en Filipinas. El matrimonio tuvo tres hijos: Ana, Carlos y Claudia. Ha sido toda una artista, con la pintura e incluso intentando entrar en el cine de la mano de Fellini en 1971.
Pero si por algo se conoce a Pitita fue por su intento de transmitir la historia y devoción de las apariciones marianas. La religión, el misterio y la fe han sido gran parte del motor de su vida. Una vida de oración, misa dominical y devoción a la Virgen. Como muestra, el recibidor de su casa… siempre presidido por la Virgen de la Esperanza.
En 2013 Pitita publicaría el libro “La Virgen María y sus apariciones» (Espasa), en el que repasa los orígenes de María y sus manifestaciones en la Tierra. Incluso ella misma fue testigo de apariciones y así lo contaba.
Pitita se afanó en divulgar la presencia de la Virgen y seguro que ahora ella ya la ha acompañado en su último tránsito. Como homenaje a esta vida plena sólo nos queda continuar haciendo lo que Pitita Ridruejo quiso dar a conocer la historia de la Virgen y sus Apariciones:
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