Misionero salesiano recibió tres disparos durante un ataque yihadista perpetrado a cuarenta kilómetros de la frontera sur de Burkina Faso
La Inspectoría Salesiana María Auxiliadora informaba “con profundo dolor” del asesinato del misionero salesiano Antonio César Fernández Fernández. “El trágico suceso se produjo pasadas las 15:00 del viernes 15 de febrero tras recibir tres disparos durante un ataque yihadista perpetrado a cuarenta kilómetros de la frontera sur de Burkina Faso. El salesiano regresaba a su comunidad en Uagadugú junto a otros dos religiosos que pudieron sobrevivir al asalto, tras celebrar en Lomé (Togo), la primera sesión del Capítulo Inspectorial de la Inspectoría Salesiana de África Occidental Francófona (AFO)”.
Antonio César Fernández Fernández, nacido en Pozoblanco el 7 de julio de 1946, fue misionero en diversos países de África desde 1982, siendo fundador en dicho año de la presencia salesiana en Togo, siendo su primer destino. A lo largo de su trayectoria trabajó como maestro de novicios (1988 – 1998) y ejerció, entre otras funciones, como delegado de la AFO en el Capítulo General 25 (2002). En la actualidad ejercía su ministerio en Burkina Faso. Tenía 72 años de edad y había cumplido los 55 de salesiano y los 46 de sacerdote.
Este ataque se enmarca dentro de la ola de violencia que asola Burkina Faso desde 2015, en un contexto que ha vivido un recrudecimiento de la amenaza terrorista en las últimas semanas tras la celebración de la V Conferencia de jefes de Estado del G5 del Sahel, en la que este país asumió la presidencia rotatoria.
“Que el Señor Resucitado acoja con ternura al hermano Antonio César entre todos aquellos que han entregado su vida a la misión salesiana, y que María Auxiliadora, a la que tanto amó, lo acoja con el cariño de Buena Madre del cielo. Que descanse en paz”, muestra la Inspectoría Salesiana.