San Juan María Vianney, santa Teresa de Lisieux, san Luis María Grignion de Montfort… ¿Conoces las casas de su infancia? Estos lugares que vieron crecer a estos santos en potencia persisten hoy día dando un testimonio privilegiado de unas vidas espirituales fuera de lo común“La enseñanza dada sobre las rodillas de una madre y las lecciones paternas, confundidas con los piadosos y dulces recuerdos de la infancia, jamás se borran enteramente del alma”, escribió el filósofo Félicité Robert de Lamennais en El libro del pueblo (1838).
Introduciéndonos en las casas natales de los santos, se nos revela una parte de su hogar, de su vida doméstica, una huella indeleble que sin duda marcaría el alma de estos grandes santos.