La joven mujer yazida, víctima de crímenes horribles, ha encontrado hoy al Pontífice para compartir su mensaje y acabar con las violencias sexuales perpetradas durante los conflictos armadosLa activista por los derechos humanos, Nadia Murad, 23 años, premio Nobel por la Paz 2018, ha sido recibida en audiencia privada por el papa Francisco este jueves 20 de diciembre 2018. Ella ha contado a Francisco los suplicios de su pueblo en Iraq y de otras minorías en Oriente Medio. El Pontífice expresó su solidaridad y oraciones por el pueblo de los yazidíes y los cristianos perseguidos en Iraq, informó Vatican News en inglés.
Murad forma parte de la minoría étnica de los yazidíes procedente del norte de Iraq. En 2014, la joven, a sus 19 años, fue violada cada día durante tres meses por distintos hombres mientras estaba secuestrada y ha contado su historia en un libro (Yo seré la última, ed. Plaza Janés), con el que quiere denunciar que mujeres yazidíes aún son esclavas sexuales del Estado Islámico (ISIS).
Se estima que hay 3.000 niñas y mujeres yazidi que fueron víctimas de violaciones y otros abusos por parte de los militantes islámicos.
Premio Nobel
Asimismo, la joven activista ha recibido el Premio Nobel junto al ginecólogo y activista congoleño, Denis Mukwege, 63 años, quien fundó un hospital para atender a miles de mujeres destrozadas física y moralmente debido a la violencia sexual.
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En junio 2017, el Parlamento Europeo reconoció la lucha de Nadia Murad con el premio Sájarov de los derechos humanos junto con Aji Bashar, también ex cautiva y víctima sexual del ISIS.
La joven mujer yazida que vive en el exilio se ha convertido en la voz que grita ante la comunidad internacional un cambio para que otras mujeres no tengan que ser víctimas de violaciones o terminen siendo esclavas sexuales de milicianos o grupos armados.
En agosto de 2014, el Estado Islámico entró a la aldea donde vivía la familia de Murad; separaron a todos los habitantes en grupos, asesinaron a ancianos, mujeres embarazadas y varones. Luego enterraron los cuerpos en fosas comunes. Las mujeres solteras sobrevivieron para convertirlas en esclavas.
Los yazidíes son un grupo etnicoreligioso kurdo de medio millón de personas que bebe de las religiones sirio-mesopotámicas, el zoroastrismo persa y el sufismo islámico. El pueblo cree en 7 ángeles de la salvación. Por este motivo, el ISIS les considera adoradores del diablo.
La activista de los derechos humanos actualmente es embajadora de buena voluntad de las Naciones Unidas. Ella ha reiterado su voluntad de volver a Iraq un día para volver a llevar una vida normal y convertirse en artista del maquillaje.
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El 3 de mayo 2017, el Papa saludó Murad, después de la audiencia general del miércoles, y le expresó su profunda preocupación por la violencia sexual y otras atrocidades que dañan a las mujeres en escenarios de guerra.