Menudo patinazo el de esta cantante que tanto denunció la cosificación de la mujer…. Está bien. Asumo que muchos de ustedes no escuchan la música “mundana”, la música que está de moda o la música de artistas superventas. Quizá con los años han conseguido desarrollar un gusto propio, definido y claro sobre qué elegir y qué no elegir para alimentar su alma, musicalmente hablando. De acuerdo. Si es así, quizá este artículo no les interese. Si es así, probablemente lo que cante Jennifer Lopez no les importe en lo más mínimo e incluso les enfade que “desperdiciemos” letras tratando sobre ello.
Pero, -y no creo estarles haciendo una revelación-, SUS HIJOS SÍ ESCUCHAN ESTA MÚSICA. Por mucho que ustedes hayan inculcado esos mismos hábitos musicales “saludables” a las futuras generaciones, reconozcámoslo, no sabemos que escuchan nuestros hijos fuera de casa. No sabemos si el compañero o compañera de turno del colegio es fan de esta música y se la hace escuchar a nuestros hijos en los ratos libres en la escuela, cuando salen a tomarse un helado o a hacer deporte.
Porque además, estando en la adolescencia-juventud, y sencillamente por el espíritu contestatario que conllevan esos años, por mucho que les hayan inculcado esos mismos hábitos musicales “saludables”, solo por llevarles la contraria a ustedes, sus padres, es muy probable que sus hijos escuchen otro tipo de música. Es más, es muy probable que escuchen el tipo de música que ustedes les han prohibido o que ellos saben que ustedes desprecian.
Por eso, queridos lectores, es importante que sepan qué pueden estar escuchando sus hijos. Por eso, queridos lectores, tenemos que hablar de “El anillo”, el último single de Jennifer Lopez. He recibido varios mensajes y comentarios de distintas personas absolutamente horrorizadas por el contenido de esta canción en la que la artista reclama a su pareja que le dé un anillo, es decir, que la pida matrimonio: “El anillo pa’ cuando”, reza su estribillo.
Como viene siendo habitual, el tema se presenta acompañado por un espectacular videoclip con una producción y una historia que parecen emular “Juego de Tronos”. La canción es pegadiza, con un ritmo que bien podría lograr el título de “canción del verano” en Europa, ya saben, esa canción que eleva por encima de las demás sonando sin parar en cualquier playa, bar o restaurante durante los meses estivales.
Hasta aquí, estaríamos hablando de una composición sin mayor calidad musical, con un ritmo actual y bailable que pasaría a engrosar la dilata discografía de la diva del Bronx. Sin embargo, merece la pena detenerse en la letra. Aquí la dejo entera para que juzguen ustedes mismos. Simplemente subrayo las frases más… ¿“interesantes”?
Me tratas como una princesa, me das lo que pido
Tú tienes el bate y la fuerza que yo necesito
Cuando estamos solos, te juro, no me falta nada
Te pongo un trece de diez cuando estamo’ en la cama
Nunca había sentido algo tan grande
Y me vuelve loca tu lado salvaje
Tú me has dado tanto que he estado pensando
Ya lo tengo todo, pero
¿Y el anillo pa’ cuándo? (Yeah, yeah)
¿Y el anillo pa’ cuándo?
¿Y el anillo pa’ cuándo? (Yeah, yeah)
¿Y el anillo pa’ cuándo?
Hueles como me gusta
Me besas como me gusta
Me agarras como me gusta
Así, así, que a mí me gusta
Como muerde la fruta (wuh)
Si sale de noche, me asusta
Sin mapa conoces la ruta
Así, así, que me gusta
Sigue aquí, papi estoy pa’ ti
Dale atrás, que así somos las del Bronx
Don’t stop, muevete má’
Que siga la fiesta conmigo nomá’
No pierdas el enfoque
Papi tienes la clase cuando apenas la toque
Home run con tres en bases (damn, baby)
Nunca había sentido algo tan grande
Y me vuelve loca tu lado salvaje
Tú me has dado tanto que he estado pensando
Ya lo tengo todo, pero
¿Y el anillo pa’ cuándo? (Yeah, yeah)
¿Y el anillo pa’ cuándo?
¿Y el anillo pa’ cuándo? (Yeah, yeah)
¿Y el anillo pa’ cuándo?
(Mira, yeah)
No te pido na’, yo no soy mujer regala’ (he)
Ponte en eso ya, sino papi, echa pa’ ya
Oh oh, tú sabes que yo tengo lo que no tienen otras
Cuando muevo mi cuerpo, el tuyo se alborota
Las mujere’ sabemo’ lo que nos toca
Si quieren todo eso, que nos pongan la roca
Nunca había sentido algo tan grande
Y me vuelve loca tu lado salvaje
Tú me has dado tanto que he estado pensando
Ya lo tengo todo, pero
¿Y el anillo pa’ cuándo? (He) (yeah, yeah)
¿Y el anillo pa’ cuándo?
¿Y el anillo pa’ cuándo? (Yeah, yeah)
¿Y el anillo pa’ cuándo? (¿Te gusta verme bailar?)
¿Y el anillo pa’ cuándo?
No es que esté mal que una mujer le dé quizá un “empujoncito” a su novio para que este se decida a pasar por el altar y reclame “su anillo”. Pero este no es el meollo de esta canción y su letra. Lo realmente insultante y vulgar son frases como: “Me agarras como me gusta”, “Sigue aquí, papi estoy pa’ ti/Dale atrás, que así somos las del Bronx” o “Las mujere’ sabemo’ lo que nos toca/
Si quieren todo eso, que nos pongan la roca”. Son letras machistas que cosifican a la mujer y que desde luego se hacen incompatibles con el movimiento #MeToo y #Time’sUp que tanto abanderase Jennifer Lopez.
Lo único que me cabe pensar es que la artista no entiende 100% este tipo de jerga en español. Si no, resulta difícil explicarse semejante patinazo. Así que ya saben lo que escuchan sus hijos. Quizá conviene aclararles que este tipo de canciones pueden parecer divertidas pero emiten un mensaje altamente pernicioso.