El emotivo reencuentro de un joven salvado del aborto con sus padres biológicosAl cumplir 18 años, Melissa Coles, quien vivía en Parker Avenue, Indianápolis (Estados Unidos) se embarazó. Con el temor de que ni ella ni el padre lo podrían mantener, fue a la clínica abortista de su localidad.
Al estar dispuesta, en la sala de abortos, y al ir a iniciar el médico el proceso, sintió que era madre, “algo que toda mujer quiere ser”. Afuera había escuchado a manifestantes pro-vida diciéndole que lo que ella llevaba en el vientre “tiene diez deditos en sus manos y en su pies”.
Melissa, en el último instante, le dijo al médico que ella “no podía hacer eso”. El médico, irritado, tiró los guantes en un basurero y salió de la sala, dejándola en soledad. Después, Melissa se fue de la clínica. Los manifestantes creyeron que había abortado. No era así.
David, su hijo, nació el 22 de diciembre de 1993. Muy poco tiempo después, fue adoptado por la familia Scotton, del Estado de Luisiana, que anhelaba tener un hijo.
David fue criado por los Scotton, quienes nunca le ocultaron que era un niño adoptado y y que su madre biológica casi lo había abortado. Pero que, en última instancia los había escogido a ellos para criarlo.
David, con esta verdad a cuestas, en lugar de considerarse perdido, comenzó a hablar en eventos públicos, compartiendo su historia con grupos pro-vida. Ganó un Concurso de oratoria Pro-Vida de Luisiana en el Jesuit High School de Nueva Orleans.
Transcurrieron 19 años. Y Melissa, junto con el padre de David, contactó a la agencia de adopción que había mediado con los Scotton, para ver si David estaría dispuesto a conocerla.
El joven estuvo de acuerdo. Le dijo al Catholic News Service: “Quería agradecer a mis padres biológicos por abandonar la clínica de abortos y darme la vida que tengo hoy; siempre les estaré agradecido de que hayan elegido la opción de adopción para mí”.
Al enterarse de la historia y del rencuentro, el director ejecutivo de Louisiana Right to Life, Benjamin Clapper, se acercó a David para ver si estaría interesado en filmar la reunión entre él y sus padres biológicos.
La idea original de Clapper de filmar la reunión como un videoclip pro-vida pronto se convirtió en los ingredientes de una película, ahora llamada “I Lived on Parker Avenue”.
Trasmitir un mensaje: es posible la adopción
El corto documental, dirigido por Philip Braun III y producido por Joie De Vivre Media, fue lanzado en línea el 8 de marzo. La película explora la historia de los padres biológicos de David, la familia Scotton, y el propio viaje de David para descubrir dónde comenzó su vida.
“Desde el primer día, nuestro objetivo con esta película era recuperar la belleza de la adopción”, dijo David. “He dedicado gran parte de los últimos cinco años de mi vida, de forma gratuita, a, simplemente, transmitir este mensaje”.
David, quien ha promovido la película en todo el país, a miembros del Congreso y en apariciones en televisión, espera que el documental muestre el extraordinario camino de la adopción e invite a las mujeres que consideran el aborto a considerar la adopción en su lugar.
“Espero que aquellos que vean el documental sepan qué puede hacer la opción de adopción. Sin la opción de adopción, no estaría aquí hoy … mis padres no tendrían el regalo de su único hijo; ni mis abuelos tendrían el regalo de su único nieto. Eso es lo que hace la adopción. Puede salvar vidas y formar familias “, dijo.
En el futuro, David planea “mantenerse siempre en contacto” con sus padres biológicos, diciendo: “Tengo muchas ganas de ver crecer también a mi hermana y mi media hermana biológica”.
El documental “I Lived on Parker Avenue” ahora está disponible en línea de forma gratuita en: https://www.ilivedonparkerave.com/
Con información de Maggie Maslak (Angelus)