La actriz Letitia Wright, heroína de la última película de Marvel, explica por qué su relación con Dios se ha vuelto algo esencial en su vida
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En Estados Unidos, la última adaptación al cine de Marvel Studios, Black Panther, es un auténtico éxito de taquilla. Acumula ya más de 400 millones de dólares de beneficios en 10 días desde su estreno. Un comportamiento increíble, ya que solo un puñado de películas ha logrado semejante rendimiento en la historia del cine. Los expertos predicen que, a este ritmo, Black Panther podría destronar éxitos como Vengadores (623 millones de dólares de beneficios en Estados Unidos), Titanic (659 millones) y Avatar (760 millones). Ahí es nada.
La película, la primera protagonizada por superhéroes negros en este universo cinematográfico, presenta un elenco excepcional de actores que causan sensación en la pantalla. Este es el caso de Letitia Wright, por ejemplo, que destaca con brillo propio sin quedarse detrás de personajes más principales. La actriz interpreta a uno de los personajes más carismáticos de la película, la princesa tecnófila Shuri, hermana pequeña T’Challa, el héroe principal.
Su reencuentro con Dios
Después de interpretar este papel, la actriz sintió la necesidad de tomarse un descanso. ¿La razón? Su relación, demasiado estrecha, con el personaje de Shuri, y su necesidad de volver a Dios, como explicó en el programa británico This Morning:
“Necesitaba una pausa de la interpretación porque lo cierto es que la estaba idolatrando [al personaje de Shuri; Ndlr]. Así que lo dejé e inicié un viaje para descubrir mi relación con Dios, y me hice cristiana. Sin duda esto me ha traído muchísimo amor y luz a mi interior. Me sentí segura, como si no tuviera necesidad de aprobación de nadie más o de recibir un papel. Mi felicidad no dependía de eso, dependía de mi relación con Dios”.
En otra entrevista, concedida a Vanity Fair, Letitia Wright explicó haber llegado a esta decisión después de asistir a un curso sobre la Biblia en Londres. Cuando descubrió el poder de la fe, quiso sumergirse completamente en ella. En particular, habría renunciado a un papel en una película para concentrarse completamente en esta nueva relación con Dios. Varios meses después, finalmente retomó el camino de los rodajes, pero con una nueva fuerza en su interior. Desde entonces, considera su carrera como un “ministerio”, como si Dios le hubiera dado una nueva misión a través de su profesión. Para ella es una cuestión de honor el no ocultar sus creencias religiosas y reza antes de rodar una escena.
En 2016, declaró para Premier Gospel: “Allá donde vaya, donde Él me lleve, ahí necesito extender el amor de Dios (…) Porque las almas de las personas están muriendo. Mi alma estaba muriendo y Él me salvó. Así que no puedo guardarme esto para mí misma (…) Me enamoré de Jesús y sigo enamorada. Amén”. Con motivo del estreno de Black Panther, Wright publicó en su cuenta oficial de Twitter un mensaje de agradecimiento a Dios por la película:
“¿Os importa si alabo a Dios? ¡Solo quiero dar gracias a Dios por todas las bendiciones y todo lo que ha hecho por el elenco y el equipo de @theblackpanther! ¡Ahora os pertenece a todos vosotros! Disfrutad, disfrutad, disfrutad”.
https://twitter.com/letitiawright/status/964585394053541888?ref_src=twsrc%5Etfw&ref_url=https%3A%2F%2Ffr.aleteia.org%2F2018%2F02%2F26%2Fletitia-wright-la-star-de-black-panther-je-suis-tombe-amoureuse-de-jesus%2F
La actriz Letitia Wright también ha anunciado en su cuenta de Twitter que se ha unido al reparto de la próxima película, Vengadores: Infinity War, que se estrenará en mayo de 2018. Una alegría para todos los fans que quedaron encantados con su actuación en Black Panther.