Un sacerdote dio a conocer el caso de los morochitos Fabián Andrés y Andrés Fabián, un cuadro de desnutrición que delata la dureza con que el Gobierno de Maduro impide abrir un canal humanitarioEl recibimiento de un grupo de niños por parte de Jesús de Nazaret, es uno de los actos trascendentales con que se recuerda el compromiso con los más pequeños. Sus apóstoles en un principio querían impedir este hecho, pero las palabras de Jesús fueron contundentes: “Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el Reino de Dios es de quienes son como ellos”. Otros episodios narran las preferencias del Salvador, para devolverles la vida, sanarles de sus enfermedades y darles de comer a los pequeñines.
Con reflexión se presenta la historia de Fabián Andrés y Andrés Fabián, morochos de apenas un mes de nacidos, con el fin de hacer conciencia sobre el compromiso que se debe tener con las personas más vulnerables debido a la crisis que se vive en Venezuela.
Grito en las redes sociales
El sacerdote venezolano Ronny López, párroco de Santa Rosa de Lima, en la Arquidiócesis de Barquisimeto, al conseguirse con el caso, el pasado 13 de enero, en la población de San Pedro Caliente, en el estado Lara, emprendió una acción motivadora en las redes sociales, alertando ante el evidente cuadro de desnutrición de los hermanitos.
Inicialmente encontró el apoyo de la Red Provida Barquisimeto y el padre Gilberto Ocanto. Luego se sumó la Red Provida Caracas, a cargo de Karola Dumas de De Los Reyes, permitiendo que el grito se hiciera más fuerte para denunciar los hechos y al mismo tiempo motivar a la solidaridad, como en efecto ocurrió, dijo Ronny López.
“Fabián Andrés y Andrés Fabián, nacieron en Barquisimeto hace un mes, pero sus familiares son oriundos de una población llamada San Pedro Caliente, cerca de mi parroquia, una zona donde muchos venezolanos están padeciendo por la crisis. Algunos han fallecido debido al hambre; otros, por las enfermedades y la desnutrición”, denunció.
Explicó que las condiciones en que fueron encontrados los bebés se convierten en el cuadro más revelador de lo que ocurre en Venezuela. “Nuestro país está sumergido en la indolencia oficial. Nuestra gente necesita comer y reclama a las autoridades nacionales que se abra un canal humanitario para resolver el problema de la comida y los medicamentos”.
Solidaridad inmediata de emigrantes
Ronny agradeció el apoyo de venezolanos que ahora residen en el exterior quienes conmovidos por este caso, enviaron aportes económicos, insumos médicos, pañales desechables, leche y ropa infantil a la parroquia. “Estamos sorprendido del apoyo recibido hacia los morochitos, especialmente porque casi el 80% proviene de venezolanos que tuvieron que dejar a Venezuela, lo cual demuestra que realmente aman a su país”, aseguró.
Informó que los morochos ahora se recuperan en el Hospital Pediátrico de Barquisimeto donde se les diagnosticó desnutrición crónica. “Dios mediante se recuperarán, al igual que su madre, una señora que ha tenido otros hijos. Ella está recibiendo atención médica para que genere una buena lactancia, ya que el problema de desnutrición en los niños se produjo estando todavía embarazada ante la falta de comida”, explicó el sacerdote.
“Necesitamos que el Gobierno no solamente piense en tener y fortalecer una estructura política sino que sea sensible ante las necesidades que están pasando los venezolanos, especialmente, los niños y ancianos. El Gobierno debe tener un grado de humildad y aceptar que Venezuela necesita ese canal humanitario, donde llegará apoyo de hermanos propios que están afuera, así como de países y organizaciones de ayuda humanitaria”.
Finalmente reflexionó acerca del Jesús que pidió a los apóstoles dejar acercar a los niños y que les dieran de comer. “Son llamados para los venezolanos de hoy. Salgamos a las calles a enterarnos de quién nos necesita o está urgido de medicina y de comida. Esos llamados de Jesús no fueron solamente en Galilea sino que tienen mucha vigencia hoy en Venezuela”.
¿Quieres apoyar? Cualquier apoyo que se le quiera brindar a los morochitos, se puede canalizar a través del Banco Provincial, en la cuenta Corriente: 0108 22402 8201 0016 8180, a nombre de la Parroquia Santa Rosa de Lima, cuyo RIF es: El RIF: G-2001133-2. Los contactos por el correo: padreronnylopez@gmail.com y el celular: +58 414 5062822.