Uno de sus “embajadores” más importantes ahora está en pleno ojo del huracán
Si había alguien que era motivo de orgullo para los peruanos, ése era Mario Testino, uno de los fotógrafos más afamados a nivel mundial desde hace décadas.
No sólo ha logrado hacer infinidad de portadas para las revistas más populares (como Vogue), sino también es el responsable de una larga lista de campañas de reconocidas firmas de moda y hasta uno de los fotógrafos favoritos de la familia real británica (de hecho, fue el encargado de las imágenes de compromiso de los duques de Cambridge, William y Kate, por no hablar de las múltiples fotos que le hizo a la princesa Diana).
Pero todo eso ha quedado en pausa porque el NY Times lanzó un artículo el pasado domingo donde afirma que 13 modelos y ex asistentes de Testino se acercaron a la publicación para denunciar que habían sido acosados y/o abusados sexualmente por él.
La noticia cae como un balde de agua fría porque las referencias de Testino siempre habían sido las de un hombre muy profesional y gentil. Incluso, hace pocos días estaba en su natal Perú para inaugurar dos centros de salud, Narihualá y Monte Sullón, en el golpeado distrito de Catacaos, que habían sido afectados por el fenómeno de El Niño costero.
El fotógrafo había logrado recaudar $120 mil a través de su museo Mate, que se encuentra en Lima, y la ONG Save the Children para que estos centros volvieran a poder operar: “Los peruanos tenemos la obligación de ayudar a los más necesitados, más aún a aquellos que sufrieron una inundación”, dijo Testino hace apenas una semana (de hecho, las fotos de la inauguración son su última publicación en su cuenta de Instagram).
Y es que si algo tiene Testino es que no deja en duda que es peruano (aunque tiene años viviendo en los Estados Unidos) y que se siente muy orgulloso no sólo de representar a su país, sino también de poder ayudar a su gente gracias al éxito alcanzado. Tanto es así que, en el 2010, el entonces presidente de Perú, Alan García, le otorgó a Testino la orden al mérito por servicios distinguidos en el Grado de Gran Cruz, destacando su “enorme virtud de sintetizar en lo instantáneo todo lo que significa el alma del fotografiado o la alegría de los fotografiados… un arte que sólo los elegidos pueden tener”.
Ahora surgen estas acusaciones -que, por los momentos, han sido negadas por sus abogados- y las marcas, las revistas y hasta la familia real británica han dicho que no trabajarán más con él hasta que se aclare todo esto (incluso se había pensado que sería el fotógrafo oficial de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle); sin embargo, es curioso que en las redes sociales mas bien se leen palabras de apoyo para el fotógrafo (especialmente de peruanos) esperando que todo se trate de un malentendido que no manche la reputación de un hombre que ha sido muy querido tanto por sus fotografías como por su labor cultural y filantrópica.