El amor con Síndrome de Down llega a “First Dates”Sara y Manolo protagonizaron la cita más bonita de “First Date”, uno de los programas de televisión más populares en España emitido por el canal Cuatro. Estos dos jóvenes con síndrome de Down demostraron a los espectadores que el amor no tiene discapacidad.
Más aún, la capacidad de amar que tienen personas como ellos es inmensa, es ejemplo para toda la sociedad.
Sara es de Cádiz y Manolo de Córdoba. Sara tiene 23 años y Manolo 33. Los dos llevan sangre andaluza en sus venas y comparten, cómo no, el amor por el flamenco.
Tal es así que Manolo es cantaor y, antes de conocer a Sara, subió al escenario del restaurante para dedicarle una canción con un mensaje muy inspirador: “Yo soy feliz como soy”.
La actitud de estos dos jóvenes da mucho de qué pensar. Me gusta comprobar que son personas felices, seguras de sí mismas, naturales y que no desean ser otros. Como afirma Manolo, “no somos bichos raros ni especiales. Somos como ustedes”.
¡Son tan importantes los valores que nos transmiten!
Su primera cita es de manual. Acudieron al restaurante bien vestidos, ella con un vestido amarillo y él con pantalón negro y camisa blanca.
Sara iba bien maquillada, con sus gafas y una gran sonrisa. Se mostró tal y como es, una bellísima persona por dentro y por fuera. Y Manolo, también con sus gafas y una sonrisa un poco más tímida encandiló a Sara con “una dulzura que quita el sentido”, tal y como ella lo describió más tarde.
Se sentaron en una mesa de dos para conocerse y, por ello, quisieron primero escuchar antes que hablar. Hacer preguntas antes que contestarlas. Buscaron primero descubrir la belleza interior del otro y, después, mostrar la suya tal y como es, sin florituras.
Los nervios los resolvieron cogiéndose rápidamente la mano. Y abrieron su corazón, sin atender a las cámaras que grababan este primer encuentro. Fueron sinceros.
Sara se describió como una mujer “simpática, amable y divertida” y Manolo le aseguró que es “amable, cariñoso y, sobre todo, fiel“.
Y claro, como no podía ser de otra manera, las palabras de Manolo encandilaron a Sara que terminó por confesarle: “Me gustaría que mi primer amor fuera como tú”.