Contempla a tus hijos con la fascinación con la que ellos miran una pompa de jabón
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Es imposible que un niño no quede fascinado ante una pompa de jabón. Observa el modo en que la fina capa de líquido exhibe distintas tonalidades de color y queda petrificado ante tanta belleza.
Pero ese singular momento de contemplación, inevitablemente, solo dura unos segundos. La pompa estalla y es imposible volver a recomponerla. Haremos otra, pero esa ya ha consumido su vida.
Eso mismo sucede con el tiempo que pasamos con nuestros hijos. Cada segundo que vivimos con ellos, cargado con toda la belleza que condensa, se evapora sin darnos cuenta. Por eso es importante que los reconozcamos como fascinantes y disfrutemos de ellos en plenitud.
La familia Cabrera Gutiérrez (formada por Rubén, Pachu y sus cinco hijos), conocidos en redes sociales como “Pompas de elefante” así lo entiende. Intentan prestar toda la atención en lo que ellos denominan “momentos pompa”, un tiempo en familia que cuidan y planifican con creatividad y entusiasmo.
¿Qué es un “momento pompa”?
Un #MomentosPompas es un plan en familia. “Momentos” porque son únicos, porque los quieres recordar junto a alguien y “Pompas” porque son irrepetibles, los vives, se explotan y los puedes volver a hacer pero nunca serán iguales, porque crecemos, cambiamos, evolucionamos nosotros y el destino.
¿Por qué es importante practicar el “slow life” en familia?
Hace tiempo decidimos parar, pensar, disfrutar. La vida es única, vivimos el día a día, dejamos atrás el pasado y el futuro ya vendrá, pero disfrutar cada momento, cada minuto, cada circunstancia, es lo que hace valorar lo que tenemos, a quién tenemos y cómo lo disfrutamos.
¿Cuál es el secreto para disfrutar del ocio en familia?
Alegría, pensar que la sonrisa es como un bostezo, quien te ve se contagia aunque no te conozca. Quizás sea el ocio uno de los momentos más importantes y enriquecedores con nuestros hijos. Es el momento donde somos lo que somos, de forma sencilla. Dejamos preocupaciones de lado, lo académico y laboral pasa a un tercer o cuarto plano. Lo único importante es disfrutar del otro y con el otro.
Dicen que cuando se tienen hijos se renuncia a viajar…
No se renuncia a viajar, viajas igual o más (en nuestro caso) pero de forma diferente, con otras ideas y sobre todo, con otros compañeros de viaje que te hacen conocer destinos con otros puntos de vista.
¿Cómo viajáis?
Viajamos fundamentalmente en furgoneta y somos siete, así que con lo esencial para ir a la aventura. Paramos cuando queremos porque viajamos personas desde los 36 a los 3 años, cada uno con sus necesidades, sus inquietudes y su ritmo. Si vemos algo apetecible para conocer, paramos; si uno quiere estirar, paramos; que el momento pide descanso y se puede tirar más kilómetros, seguimos. Pero siempre pensando en cada uno, que el viaje no sea ni aburrido ni un castigo.
¿Cada hijo se hace su propia maleta? ¿Cómo ganan en autonomía los hijos al viajar?
Ayudan a hacer las cajas (viajamos con cajas, por orden y estructuración de nuestro “Bubús”, que es nuestra furgoneta en la que viajamos, vivimos esos días y nos movemos). Llevamos lo esencial y a lo que sí ayudan mucho es a organizar, ordenar, limpiar, cocinar y tener unos días fantásticos con una buena disposición por parte de todos. Del pequeño al mayor colaboran con los pequeños quehaceres diarios.
¿Qué les aporta a los niños y a vosotros los viajes?
Educación, conocimiento, apego, compañerismo, unión, valorarnos, querernos, conocernos y respetarnos. En el fondo, experiencias vitales que se guardan en lo más profundo del corazón y que forman parte fundamental de lo que somos.
¿Se necesita mucho dinero para viajar?
Más bien se necesita infraestructura, ganas y emoción. Saber que hoy puedes dormir en un río, otro día en un camping, otro en una montaña y otro con más gente que comparte como tú. Sobre todo estar dispuesto a conocer gente y ayudarnos en lo necesario.
Uno de vuestros destinos fue visitar santuarios marianos. ¿Creéis que pudo ayudar a vuestros seguidores de redes sociales conocer lo que supuso esta experiencia para vuestra familia?
Sí, por supuesto, llevamos dos años y medio con el blog. Nunca pensamos que iba a llegar lo que es hoy gracias a Instagram. Mucha gente nos escribe, nos pregunta, nos cuenta; a veces por desahogo, porque les “escuchemos”, otras por ayuda, porque necesitan una mano con algo concreto, otras porque necesitan algo que ven en nosotros.
Dios, con María, nos ha dado la oportunidad de ser sus instrumentos a través de “una herramienta moderna” que es Internet y las redes sociales. Nosotros lo hemos aceptado poco a poco sin saberlo y ahora es cuando nos damos cuenta, por algunos frutos que vemos.
Siempre contamos una anécdota y fue una chica que preocupada nos escribió y nos pedía que rezáramos por ella (no sabéis lo que es nuestro Santuario Hogar, nuestro rinconcito en casa donde rezamos, siempre hay alguien presente, peticiones y demás). Bueno, esta mujer nos pedía por su marido, que no era creyente y al ver uno de nuestros Momentos Pompas en un Santuario mariano, le enseñó aquella entrada y se fueron. Se convirtió, hoy va a misa siempre que puede y no sólo los domingos. Pues frutos como éste, sin nosotros hacer nada (sólo queremos ser instrumentos de Dios), son los que nos hacen seguir con ese perfil en Instagram, el blog, y en otras redes.
Acabáis de recibir el Premio Familia que concede la revista Misión por vuestro “testimonio público de alegría, entrega y apertura a la vida». ¿Cómo os sentís?
Emocionados y con un poco de vergüenza, porque no hacemos nada del otro mundo. Sí que nos consideramos una familia alegre, nuestro lema en casa es “la alegría es la atmósfera donde crecen las virtudes heroicas” del Padre Kentenich, y ver que lo conseguimos es un chute de emoción.
Entrega, porque estamos abiertos a todo el que lo necesite. Nuestro correo está abierto las 24 horas y todos los días y siempre estamos dispuestos a escuchar.
Y apertura a la vida, Dios sabe porque hace las cosas, así nos pidió nuestra entrega matrimonial y así se la damos, siempre con las manos abiertas y dispuestos a todo.
¿Cómo os inspira la Sagrada Familia como modelo a seguir?
Él, lleno de amor, cariño, entrega y devoción, fuerte, sin prejuicios, hacia delante e incesante. Ella, bondadosa, digna, piadosa, obediente y alegre, entregada, fiel y confiada. Un hijo amado, querido, humilde, sencillo y entregado. Hay gente que quiere ser como un cantante, una actriz, un príncipe, un futbolista… ¡Nosotros lo tenemos claro! Éste es nuestro ideal… Tenemos un ideal muy alto y muy fuerte, aspiramos a algo grande.
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