Aunque no sea una cuestión de vida o muerte, evítalo tanto por ti como por el planeta
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Contaminación por químicos
Cuando sometes a una botella plástica a altas temperaturas (como cuando la dejas, por ejemplo, dentro del auto o vas al gimnasio), las capas de plástico externas se pueden disolver y soltar un químico llamado Bisfenol A (BPA), el cual puede contaminar el agua que estás tomando. ¿El mayor problema? Así sea que ingieras una pequeña cantidad, ese químico tiene la capacidad de imitar el estrógeno (nuestro cuerpo no los diferencia) y afectar las funciones de tu sistema endocrino o, hasta incluso, aumentar los riesgos de una endometriosis y cáncer de seno.
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Dificultad para tener bebés
Hay que aclarar que todavía no hay suficientes estudios que demuestren esto al 100%; sin embargo, algunas investigaciones que se han hecho indican que las mujeres con altos niveles de BPA en su sangre u orina tienen más dificultades de quedar embarazadas por el desajuste hormonal.
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Tu economía
No en todos los países se puede tomar agua directamente del grifo porque no es potable; sin embargo, aún en esos casos, resulta mucho más económico y sano comprar un filtro o un gran botellón de agua fabricado en vidrio (que sí lo puedes reusar sin problema) y verter tu agua diariamente en tu termo de aluminio (que, además, conservará mejor la temperatura) que andar comprando botellitas todas las semanas (sobre todo si son de marca).
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Reusarlas puede exponerte a bacterias
A diferencia de las botellas de aluminio o vidrio, las de plástico se pueden agrietar con mayor facilidad (incluso por simplemente agarrarlas con mucha fuerza) y en esas hendiduras se pueden alojar bacterias. La grandísima mayoría de estas no son dañinas, pero hay un pequeño porcentaje que pueden contribuir a que te dé, por ejemplo, un resfriado.
- La Madre Tierra
Si bien es cierto que las botellas de plástico se pueden reciclar, las estadísticas demuestran que muy pocos lo hacen y terminan en la basura. Si esta tendencia continúa, los expertos predicen que habrá unos 26 millones de libras de residuos plásticos para el 2050, ya que hay que recordar que el plástico no es biodegradable y estas botellas pueden pasar siglos desintegrándose.