Reacciones contrarias al decreto obligaron a la presidenta de la Constituyente de Maduro reconocer las funciones de los diputadosEn estos tiempos de la inmediatez en las redes sociales, la política en Venezuela cobra características propias de aquellas novelas del continente suramericano que integraron a la perfección elementos mágicos y fantásticos, con la realidad de cada personaje.
Este 18 de agosto, un decreto emitido por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) del que se extrae cómo verdad noticiosa la disolución de la Asamblea Nacional (AN) opositora, de repente, por “palabreríos” y volteretas de sus propios creadores, dicen que no es así, y los diputados de la Unidad siguen tan vigentes como la triste realidad nacional.
“La Asamblea Nacional que quería ser disuelta queda frustrada. Sigue en funciones, deben trabajar por Venezuela y con apego a la Constitución”, dijo sorpresivamente la oficialista Delcy Rodríguez, presidenta de la ANC luego de la tormenta informativa acerca de la disolución parlamentaria. “La Asamblea Nacional tiene sus funciones consustanciales como poder legislativo. Y debe CONVIVIR con la @ANC_ve respetando sus decisiones!”, escribió la peculiar dirigente socialista en Twitter.
Las decisiones que ha de tomar la ANC, elegida el 30 de julio, son de esperarse. Su propósito fundamental es suplantar a los poderes públicos no afectos al Gobierno de Nicolás Maduro, especialmente a la AN que en las elecciones del 6 de diciembre de 2015, reportaron a la Mesa de la Unidad Democrática, 112 diputados demócratas contra 55 oficialistas.
De la realidad a lo mágico
El 5 de agosto pasado, luego de instalarse la ANC, la primera instancia que probó del trago amargo del “poder supraconstitucional” del que dice estar imbuida, fue la Fiscalía General de la República, defenestrando a su titular, Luisa Ortega Díaz, y en su lugar colocando al defensor del pueblo, Tarek William Saab. Hoy, la ex fiscal general, antigua allegada del Gobierno Socialista en Venezuela, se encuentra huyendo junto a su esposo Germán Ferrer, electo diputado en las listas del oficialista PSUV.
De manera que este viernes 18 de agosto, la voracidad de la Constituyente de Maduro llegó en forma de decreto. Tal vez, para medir las reacciones de la comunidad nacional e internacional. La ANC no escondió el deseo de darle el zarpazo a su principal objetivo: la Asamblea Nacional. Sería el golpe más noble que un régimen de fuerza da contra la población, porque es el desconocimiento de sus verdaderos parlamentarios.
Los directivos de la AN habían sido citados por la presidenta de la ANC, Delcy Rodríguez, alegando que era para “contribuir a la convivencia entre poderes constituidos”. Debía acudir Julio Borges (presidente de la Asamblea Nacional), Freddy Guevara (primer vicepresidente) y Dennis Fernández (segunda vicepresidenta).
La cita se realizaría en las instalaciones del Palacio Federal Legislativo, teniendo a los más de 500 constituyentes cumpliendo el papel de público acusador.
En horas de la mañana de este mismo viernes 18 de agosto, los legisladores de la MUD ratificaron que “la Constituyente es fraudulenta e inconstitucional, debido a todas las irregularidades que la rodearon desde el momento de su convocatoria hasta el nombramiento de los constituyentes”.
“No compareceremos ante la mentira constituyente y no descansaremos hasta recuperar el orden constitucional y lograr elecciones libres”, publicó el Parlamento Venezolano en su cuenta de Twitter @AsambleaVE. Por tanto, no asistieron a la “invitación” y el decreto de sustitución de sus funciones llegó antes del mediodía.
El constituyente Elvís Amoroso, leía el decreto mediante el que la Constituyente asumirá las competencias para legislar sobre todas las materia, específicamente concerniente a la paz y el modelo socioeconómico de Venezuela. El decreto contiene que la ANC que podrá “dictar actos parlamentarios sin forma de ley vinculados con las referidas materias, conforme al mandato del artículo 349 de la Constitución”.
Rechazo inmediato…
Nuevamente, las reacciones de la AN no se dejaron esperar. En una carta publicada también en redes sociales, ya que su Página Oficial se encuentra presuntamente hackeada, el Parlamento elevó su voz catalogándose como “legítima representante de la voluntad de Venezuela”. También desconoció la “ilegítima” Asamblea Nacional Constituyente y reiteró la vigencia de la Constitución de 1999.
Otra voz que rechazó la actuación de la ANC fue el secretario general de la OEA, Luis Almagro, quien publicó reiterados mensajes en su cuenta de Twitter, denunciando que la “Disolución fraudulenta de la @AsambleaVE por ANC es profundización del golpe de Estado en #Venezuela”.
“Hoy es más imperativo que nunca Consejo Permanente extraordinario de @OEA_oficial x crisis en #Venezuela”,también dijo Almagro, lo cual pudo ser el detonante para que el decreto de la Constituyente se suavizara contra los opositores.
Tomando el respiro en lo que parece un nuevo capítulo de la triste realidad mágica que se vive en Venezuela, el presidente de la AN, Julio Borges, anunció que este sábado 19 de agosto se realizará una sesión en el hemiciclo, acompañados por el cuerpo diplomático acreditado por el país. El parlamentario recordó en Twitter que “Venezuela y más de 50 países desconocen cualquier acto legal de la ANC”.