Una delegación chilena viaja al Líbano para entrevistare con las familias que llegarán próximamente
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Está previsto que suceda entre octubre y diciembre. La llegada de estas personas provenientes desde Oriente Medio a Sudamérica forma parte del denominado “Programa de Reasentamiento de Refugiados Sirios en Chile” y es una iniciativa que se está llevando a cabo entre el gobierno, la Vicaría Pastoral Social Cáritas del Arzobispado de Santiago y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
En los últimos días se definió que las comunas de Macul (Región Metropolitana) y la de Villa Alemana (Región de Valparaíso) serán los lugares de acogida para un grupo de 60 personas que serán reasentadas en Chile.
“El programa se instala como una política de Estado y con un carácter humanitario y apolítico. De allí la importancia del involucramiento de las organizaciones de la sociedad civil, los municipios y, en particular, de la comunidad siria”, expresó el coordinador general del programa, Alfredo del Río, reproduce el ACNUR en Chile.
Es que gracias a esto se está tejiendo una auténtica “red de solidaridad” a través de la disposición de varias municipalidades que han expresado el apoyo y contención a las primeras familias que llegarán al país trasandino. Como criterios de selección de estos lugares de acogida se tuvieron en cuenta diversos aspectos como las laborales, conectividad y posibilidades de reinserción, entre otros.
Desde ACNUR en Chile también se elogió la actitud y el compromiso de Chile con “la crisis global de desplazamiento forzado” y se lo califica como una muestra de “responsabilidad internacional con aquellos países que han llevado la carga más pesada”.
Quien también hizo referencia a esta situación fue el secretario ejecutivo de la Vicaría Pastoral Social del Arzobispado de Santiago, Luis Berríos, quien señaló que “este programa es es una vinculación con una realidad internacional latente, a la cual el mismo papa Francisco nos ha llamado y él ha hecho gestos concretos respecto a la situación que está pasando con los refugiados sirios”.
“Esto es ponernos en alianza con esta estrategia y también profundizar el acompañamiento que hace el Arzobispado de Santiago, a través de la Vicaría de Pastoral Social, a las distintas situaciones de vulnerabilidad y exclusión, en este caso una que es un poco lejana, pero que es muy simbólica. Esta instancia nos permitirá vincular al resto de las comunidades con esta realidad que está ocurriendo”, agregó.
Una delegación de las organizaciones vinculadas al programa está viajando en estos días a Beirut, Líbano, con el objetivo de empezar a concretar una segunda fase y que tiene que ver con conocer y entrevistarse con las familias candidatas a reasentare en Chile.
Chile evidencia su compromiso y solidaridad #ConLosRefugiados:https://t.co/wCE2bjxrwt
— Acnur/Unhcr Américas (@ACNURamericas) August 14, 2017
Un país que sabe de refugiados
En base a datos proporcionados por la propia ACNUR, Chile alberga a cerca de 3.000 refugiados y solicitantes de asilo. La gran mayoría son de nacionalidad colombiana, pero estas personas provienen de diversos países de la región y también de otros continentes como África, Asia y Europa.
En cuanto al principal lugar de ubicación, “el 20% de la población de interés de ACNUR en Chile vive en la zona fronteriza norte”. Las ciudades de Arica, Iquique (uno de los lugares que visitará el papa Francisco en enero), Calama y Antofagasta son las principales en cuanto a esta población.
Desde hace años Chile tiene en marcha un programa para refugiados y se ha transformado en un país conocedor de estas cuestiones, además de ser uno que en los últimos años también se ha convertido en un verdadero centro de atracción para extranjeros de diversos lugares de la región, aspecto que también es motivo de debate.
A Chile han llegado centenares de refugiados de origen afgano, palestino, yugoslavo, además de los del propio continente americano. Por lo tanto, lo que sucede con los sirios será una etapa más y de alguna manera es una señal de reafirmación del espíritu de acogida y compromiso con los más vulnerables.
Por estos días en Chile se vive el “Mes de la Solidaridad” (iniciativa inspirada en el santo chileno Alberto Hurtado), sin dudas una cuestión más que en sintonía con aquello de darle hogar a aquel que viene de lejos y huye de los conflictos más crueles. Y en eso está Chile, preparando su corazón para ese momento.
Con información de ACNUR en Chile