En febrero de 2018, la red mundial de oración del Papa dedicará las intenciones del mes para rezar por la conversión de mafiosos y corruptosEl Vaticano informó que trabaja para definir “el papel de la Iglesia y del laico contra la corrupción, las mafias y el crimen organizado” a través de acciones concretas para acabar con este mal.
“La corrupción, antes de ser un acto es una condición: de aquí la necesidad de la cultura, de la educación, de la formación, de la acción institucional, de la participación de la ciudadanía”, se lee en las actas del Debate internacional sobre la corrupción, producto de la reflexión del evento que organizó en el Vaticano el nuevo Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral.
Se trata de una iniciativa que estudiará la posibilidad de la excomunión para los mafiosos y los que participen a crímenes de corrupción, confirmó el nuevo dicasterio vaticano que engloba también funciones Justicia y Paz; «Cor unum»; para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes; y para la Pastoral de la Salud.
Los administradores corruptos «devotos del dios soborno» cometen un «pecado grave contra la dignidad» y dan de comer «pan sucio» a sus propios hijos, papa Francisco, homilía Casa de Santa Marta (8.11.2013)
La Consulta internacional sobre la corrupción, el crimen organizado y las mafias intensificará su labor a partir del mes de septiembre.
Asimismo, la Red Mundial de oración del papa Francisco ha recibido la misión de dedicar el mes de febrero de 2018 para pedir a Dios por la conversión de los corazones de los corruptos y los mafiosos.
El cardenal ghanés, Peter Turkson, jefe del dicasterio fue el encargado de convocar el pasado 15 de junio a una primera Consulta internacional sobre la corrupción y el crimen en la Sede de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales.
En esa ocasión, se reunieron fiscales, jueces, asociaciones y victimas de crímenes para organizar una batalla cultural contra la corrupción y crear una red mundial.
El documento del Consejo no ha sido fácil de redactar – admiten los organizadores- , pero tiene la premisa de abrir espacios para la reflexión del fenómeno estudiando la doctrina jurídica de la Iglesia que produciría la excomunión.
La corrupción es el modo de vivir en la blasfemia, la corrupción es una forma de blasfemia, Papa Francisco, homilía Casa de Santa Marta (24/11/2016).
La tarea de la red anti corrupción se extiende a las conferencias episcopales que en el territorio deberán encontrar la modalidad para una justa acción, hasta llegar a la excomunión que pidió el papa Francisco en una visita, en Jonio, 2014, sur de Italia, con la frase perentoria dirigida a los afiliados a la temida mafia de Calabria, L’Ndrangheta : “Los mafiosos están excomulgados”.
En este sentido, la ex comunión es la pena más grave que un católico pueda tener y termina solo a través del sacramento de la confesión y el perdón recibido por un sacerdote. Sin embargo, existen excomuniones que sólo el obispo, o la Santa Sede, es decir en la Penitenciaría apostólica, pueden quitar.
Según la agencia SIR, la intensión de oración de febrero del Papa está inspirada en el homicidio del sacerdote Beato y Mártir Giuseppe Pugliesi por mano de mafiosos para que “los que tiene un poder material, político o espiritual no se dejen dominar por la corrupción”.
El Consejo tiene como objetivo asimismo de establecer cuales son las distintas definiciones del concepto de “corrupción” y se propone en no proponer solo “pías exhortaciones, porque se necesitan gestos concretos”.
“Entretanto, se esperan maestros de credibilidad al interno de la Iglesia”, o sea prelados, religiosos, religiosas y laicos.
“La Iglesia, en el mundo, es ya una red, y por esta razón puede y debe ponerse al servicio de esta intensión con coraje, decisión, transparencia, espíritu de colaboración y creatividad”.
Papa Francisco: Los mafiosos está excomulgados
“L’Ndrangheta es adoración del mal y desprecio del bien común. Este mal debe ser combatido, ¡es necesario decirle que no! Palabras fuertes, las de Papa Francisco contra la criminalidad organizada que seña la tierra de Calabria con su pecado, sustituir la adoración del Señor con aquella del dinero. El Pontífice ha pronunciado estas palabras en modo claro en la homilía de la misa conclusiva de su visita a la diócesis de Cassano all’Jonio, ante la presencia de más de 250.000 personas, en la fiesta del Corpus Domini. Adoradores del mal, explicó el Papa, son aquellos que viven de deshonestidad y de violencia”.