Cuando el trabajo atropella a la persona
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Tener un buen trabajo y adquirir una buena educación son algunas de las principales preocupaciones generalizadas hoy en día. Ambas son necesarias para el desarrollo de la persona. Sin embargo, ¿qué pasa cuando alguna de ellas o ambas se ponen por encima de la persona misma? ¿Acaso el mundo agitado de hoy nos ha cegado y creemos ser máquinas? ¿Está realmente el sistema por encima de todo?
Dos horas después de dar a luz a su bebé, Carmen Truyols tuvo que salir corriendo de la sala de partos para examinarse. Salió prácticamente con la epidural aún puesta.
Esto, ocurrido en Madrid a finales del pasado mes de noviembre, es un ejemplo excesivo e inhumano que presenta una reflexión importante: ¿estamos hechos para el trabajo, la educación, por encima de lo más básico que es nuestra salud, nuestros hijos, nosotros mismos? ¿No es al contrario? ¿El trabajo y la educación al servicio del ser humano?