La recaída de millones de latinoamericanos en la pobreza se convierte en una nueva amenaza
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El último informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) presentado en el mes de junio cayó como un “balde de agua helada” para América Latina. De 72 millones de personas que lograron salir de la pobreza entre 2003 y 2013, más de un tercio podría recaer.
Esto fue confirmado por el propio jefe para América Latina del PNUD, George Gray, en su reciente visita a La Paz, Bolivia. Es que lo que al principio del nuevo milenio significaba un dato alentador -nada menos que 72 millones de personas lograron superarse y encontrar mejores condiciones de vida- en los últimos años comenzó a darse vuelta.
El informe expresa de forma contundente que la población más vulnerable, entre 25 y 30 millones, en cuanto a esta posible recaída tiene que ver principalmente con mujeres y jóvenes, en muchos casos obligados a abandonar sus estudios para salir a ganarse la vida con trabajos informales y de bajos retornos económicos.
¿Más motivos?
Desaceleración económica a nivel mundial, además de debilitamiento de políticas asistencialistas (muchas aplicadas al corto plazo y con el riesgo que ello supone), desastres naturales, entre otros. Como ejemplos pueden presentarse países como Brasil, Argentina y Venezuela que empezaron a sumergirse en crisis económicas.
No obstante, el informe, recordado por La Tercera, destaca el esfuerzo de otros países como Perú, Bolivia, Ecuador y Paraguay (países con índices desfavorables muy altos) que han logrado sobreponerse en la región en la lucha contra la pobreza.
¿Qué hacer?
El PNUD expresó en su momento una serie de recomendaciones que van desde la fortificación de factores que impiden el retroceso como la protección social, los sistemas de cuidado, fomentar los activos físicos y financieros, además de apostar por mayor calificación laboral.
En ese sentido, el PNUD expresa que la recaída es posible con políticas públicas de nueva generación, como las que hacen énfasis en estos factores, pero también de otros que buscan evitar injusticias sociales, mayor resistencia ante desastres ambientales, etcétera.
Es por ello que evitar que muchos latinoamericanos que lograron salir de la pobreza recaigan en ella se transforma en un desafío actual para todo el continente. En última instancia se trata de tema vinculado a darle mayor dignidad a la persona humana.
