El amor es una elección voluntariaEl protagonista de este video, Chema, es un digno hijo de nuestro tiempo. Al menos, de la cultura secular de nuestro tiempo. El mundo contemporáneo considera al matrimonio como una institución mágica, como algo que necesariamente tiene que proporcionarle felicidad, porque “tengo derecho a ser feliz”. Chema cree que su relación se estancó, y en ningún momento se le pasa por la cabeza que todo lo que le pasa, le pasa por su única y exclusiva culpa. Cree que su relación es rutinaria, pero no se plantea por qué han caído en la rutina, ni qué puede hacer él para evadir esa rutina.
Querido Chema: te quejas porque el aire es gratuito. En primer lugar, si tu esposa te llama amorosamente para decirte que tienes comida en la nevera, y que no te preocupes por ella, que no va a llegar a cenar, porque le ha surgido un problema, tu deber de esposo es inmediatamente preguntarle: ¿qué problema?, ¿en qué te puedo ayudar?, ¿quieres que te busque?