​Un alcalde escribe al Papa Francisco: No se lleven al cura del pueblo

No es muy distinto a Don Camilo… aunque el sacerdote se llama Fermanel y no Fernandel. Como Peppone, Jean-François Lovisolo, el alcalde socialista de la Tour-D’aigües (Vaucluse, Francia) no frecuenta la iglesia del pueblo, pero asegura que el sacerdote se ha hecho “indispensable para el municipio”.

Según informó recientemente el periódico La Provence, cuando el padre Frédéric Fermanel fue llamado a Roma para proseguir su formación, el alcalde tomó su mejor pluma para dirigirse al Papa Francisco.

“Ha sido capaz de unir más allá [de los feligreses]… ha sabido crear diálogo, forjar vínculos de hermandad en un momento en que nuestra sociedad se caracteriza por el repliegue sobre uno mismo”, reconoce el político.

Toman al sacerdote por alcalde

Los dos hombres se conocen bien y actúan juntos con lo que ellos llaman “una visión común del ser humano y de la vida en comunidad”.

Presente en las manifestaciones por deseo del alcalde, y en la cafetería del pueblo, al padre Fermanel le llaman “señor cura”, “padre Frédéric”, “Fredo” e incluso “Jesús”.

“Para algunos soy el alcalde –bromea el sacerdote-. Me hablan de los problemas de las ratas, de las basuras,…”.

En el bar de Correos, la ama Carine quiere lanzar una petición para impedir su partida. “Hace unas homilías magníficas y para los entierros siempre tiene una anécodta que contar sobre la persona; esto es porque dedica tiempo a hablar con todo el mundo”, explica.

Su sentido del contacto con las personas y su escucha de los demás habría permitido a algunos no creyentes reencontrar el camino de la espiritualidad. ¡El alcalde está masivamente apoyado por los feligreses en su iniciativa!

“Obedezco a mi obispo”

El principal interesado reconoce vivir esta separación como un desgarro: “Estoy muy vinculado a este territorio pero yo obedezco a mi obispo”, declara.

Ahora debe seguir en Roma una formación de tres años para obtener el doctorado, lógica continuación de su recorrido de universitario eclesiástico.

Al alcalde le gustaría encontrar una solución para que “su” cura pueda proseguir sus estudios sin irse de La Tour-d’Aigues.