Tres testimonios de sacerdotes entregados
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El obispo de Quilmes, monseñor Carlos José Tissera, envió un mensaje a los sacerdotes saludándolos por el Día del Párroco, que la Iglesia celebra este lunes 4 de agosto memoria de san Juan María Vianney. El prelado invitó a seguir tras las huellas de Jesús y su Evangelio siguiendo el testimonio del santo cura de Ars, el Cura Brochero y monseñor Enrique Angelleli.
Monseñor Tissera consideró que el 4 de agosto será para los católicos en la Argentina una fecha para recordar particularmente a monseñor Enrique Angelelli, asesinado en 1976, según aseguró el Tribunal Oral Federal de La Rioja en la reciente sentencia por la investigación de su muerte.
El obispo quilmeño recordó que en 2006, al cumplirse 30 años de la muerte de monseñor Angelelli, el entonces arzobispo de Buenos Aires, cardenal Jorge Bergoglio, afirmó que el recuerdo del difunto prelado interpela a mirar su testimonio fiel al Evangelio.
En aquella ocasión, el actual pontífice manifestó: “El recuerdo del obispo Enrique no es una simple memoria encapsulada; es un desafío que hoy nos interpela a que miremos el camino de ellos, hombres que solamente miraron el Evangelio, hombres que recibieron el Evangelio y con libertad. Así nos quiere hoy la Patria, hombres y mujeres libres de prejuicios.
“Queridos sacerdotes –manifestó monseñor Tissera-, creo que los testimonios de estos grandes pastores, el Cura de Ars, el Cura Brochero y el Padre Obispo Angelelli nos animan a seguir andando nomás, tras las huellas de Jesús y su Evangelio, sirviéndolo en nuestros hermanos cada día, con mayor predilección en los pobres, afligidos y sufrientes. Ellos nos ayuden desde el Cielo a ser ministros de la misericordia de Dios”.
“Te agradezco, hermano cura, por tu oración de cada día por mí junto a tu comunidad, y por tu testimonio de servicio al pueblo de Dios. Que todos crezcamos en fraternidad, y de ese modo nos ayudemos a llevar este precioso ministerio en nuestras frágiles vasijas de barro. La Virgen Madre nos cuide como a su mismo Hijo Jesús”, concluyó.+
Texto completo del mensaje
Artículo originalmente publicado por AICA