Los obispos españoles hacen un alegato a favor de la vida
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo mostró, ante los medios de comunicación, la Nota de prensa final de la CCXXX reunión de la Comisión Permanente y explicó cómo los obispos quieren recordar de nuevo: “el valor sagrado de la vida humana, desde la concepción hasta su fin natural”.
“La posición de la Iglesia católica sobre este asunto es bien conocida, y compartida con muchos hombres y mujeres de buena voluntad, que desde otras confesiones religiosas y aun sin ser creyentes, defienden el derecho a la vida de todo ser humano inocente como patrimonio común de la razón humana”, explicó el portavoz de los obispos que recordó cómo el Papa Francisco mencionó la cultura del descarte ante los embajadores acreditados ante la Santa Sede.
Tras recordar que los obispos saludan siempre las iniciativas a favor de la vida, recuerdan que “una ley del aborto, por muy restrictiva que fuera, seguiría siendo una ley injusta”. “Nadie tiene derecho, en ninguna circunstancia, a quitarle la vida a un ser humano inocente”, explicó “El aborto no es la solución, de la misma manera que el niño que va a nacer no es el problema".
Ante diversas preguntas de los periodistas sobre casos extremos de malformación o de problemas económicos de la madre, José María Gil Tamayo explicó una y otra vez que “la eliminación nunca es la solución” y volvió a repetir que “el ser humano tiene que optar por la vida”. Sobre estos casos pidió a las instituciones unas políticas y leyes de acompañamiento: “hemos hecho poco para acompañar adecuadamente a las mujeres que se encuentran en situaciones muy duras, donde el aborto se les presenta como una rápida solución a sus profundas angustias”.
La Nueva Ley de Educación
Los obispos también han valorado la situación de la religión en la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE y tras valorar “positivamente que se haya llevado a cabo la regulación de la religión católica en Educación Primaria y Educación Secundaria”, han mostrado al mismo tiempo “su insatisfacción con respecto a la regulación en el Bachillerato”.
Visita Ad Limina Apostolorum de los Obispos españoles
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española explicó algunos pormenores de la próxima Visita Ad Limina Apostolorum de los obispos españoles, programada para los días 24 de febrero al 8 de marzo de 2014.
Los obispos se dividirán en dos grupos, cada uno de estos grupos durante una semana, aunque coincidirán en Roma para celebrar el encuentro de todos los obispos españoles con el Papa Francisco, que tendrá lugar en El Vaticano el lunes 3 de marzo a las 12,00 horas. En este encuentro, el Papa tendrá su primera intervención ante los obispos españoles, tras un pequeño discurso del presidente de la CEE, el cardenal Rouco Varela.
Fernando Sebastián y las “deficiencias” de la homosexualidad
Los periodistas le han preguntado a José María Gil Tamayo su parecer ante las declaraciones de monseñor Fernando Sebastián, próximo cardenal de la Iglesia, sobre la homosexualidad. El portavoz de los obispos ha glosado la figura del nuevo cardenal de la Iglesia y ha loado toda su labor tanto dentro de la Conferencia Episcopal Española como en sus negociaciones con los diversos gobiernos.
No obstante y respecto al tema de la homosexualidad, el secretario general de la CEE ha remitido a las declaraciones del Papa Francisco a la edición italiana de “La Civitta Católica”: “Durante el vuelo en que regresaba de Río de Janeiro dije que si una persona homosexual tiene buena voluntad y busca a Dios, yo no soy quién para juzgarla. Al decir esto he dicho lo que dice el catecismo. La religión tiene derecho de expresar sus propias opiniones al servicio de las personas, pero Dios en la creación nos ha hecho libres: no es posible una injerencia espiritual en la vida personal. Una vez una persona, para provocarme, me preguntó si yo aprobaba la homosexualidad. Yo entonces le respondí con otra pregunta: ‘Dime, cuando Dios mira a una persona homosexual, ¿aprueba su existencia con afecto o la rechaza y la condena?’. Hay que tener siempre en cuenta a la persona. Y aquí entramos en el misterio del ser humano. Hay que acompañar con misericordia”