La Conferencia Episcopal Española hizo pública hoy una nota ante la futura aprobación en el Congreso de los Diputados de la ley de la eutanasia. En ella denuncian que su tramitación es “sospechosamente acelerada, en tiempo de pandemia y estado de alarma, sin escucha ni diálogo público”.
Así, lo califican de un hecho “especialmente grave”, puesto que consideran que el Estado pasa “de defender la vida a ser responsable de la muerte infringida”. En la nota piden la promoción de los cuidados paliativos: “que ayudan a vivir la enfermedad grave sin dolor y al acompañamiento integral, por tanto también espiritual, a los enfermos y a sus familias”.
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La Pandemia y los mayores
El texto hace una reflexión sobre la fragilidad de la vida y la indignación que ha puesto de manifiesto la pandemia del Coronavirus. “El descarte en la atención a personas mayores”, destacan los obispos, ha permitido que crezca la conciencia de que “acabar con la vida no puede ser la solución para abordar un problema humano”.
“La muerte provocada no puede ser un atajo que nos permita ahorrar recursos humanos y económicos en los cuidados paliativos y el acompañamiento integral”. Así de rotundos se muestran los prelados que piden “invertir en los cuidados y cercanía que todos necesitamos en la etapa final de esta vida. Esta es la verdadera compasión”.
Eutanasia en otros países
Según explican los obispos españoles,
“la experiencia de los pocos países donde se ha legalizado nos dice que la eutanasia incita a la muerte a los más débiles”. En su texto muestran que al otorgar a la persona ese supuesto derecho, la persona “se siente condicionada a pedir la muerte cuando una ley la presiona en esa dirección”.
Además, argumentan, “la falta de cuidados paliativos es también una expresión de desigualdad social. Muchas personas mueren sin poder recibir estos cuidados y sólo cuentan con ellos quienes pueden pagarlos”, afirman.
Convocatoria a una Jornada de Ayuno y Oración
En su nota recuerdan las palabras del Papa: “La eutanasia y el suicidio asistido son una derrota para todos” y piden “a cuantos tienen responsabilidad en la toma de estas graves decisiones que actúen en conciencia, según verdad y justicia”.
Finalizan su nota con una convocatoria especial para el próximo 16 de diciembre.
“Convocamos a los católicos españoles a una Jornada de ayuno y oración; para pedir al Señor que inspire leyes que respeten y promuevan el cuidado de la vida humana. Invitamos a cuantas personas e instituciones quieran unirse a esta iniciativa”.
Hoy celebramos a...