¿Conoces todas las advocaciones de la Virgen que están en Latinoamérica? Gaby Oviedo, ilustradora y animadora católica, tomó su Ipad y empezó a dibujar cada una de ellas agregando los símbolos tradicionales de cada país.
Ella es una joven que ha tocado los corazones de muchos creyentes con sus dibujos, que recuerdan cómo la Virgen está en todo lugar, protegiendo a sus hijos.
El llamado de su vocación
Gaby recibió su primer llamado de vocación hace unos años, cuando fue al Vaticano y pudo ver todas las pinturas de grandes artistas como Rafael, Botticelli y Cosimo Rosselli, un arte que no se perdía con el tiempo.
Meses después, sentada en las bancas de la parroquia de Jesús Misericordioso, en Buenos Aires, sintió que Jesús la llamaba a que pintara para Él. Entonces, decidió que para poder expresar la fe a través de sus trazos, primero tenía que estudiar más sobre la religión católica.
Un día se levantó y le surgió la idea de pintar a la Virgen de Argentina, Nuestra Señora de Luján, abrazando al país argentino. Lo que causó una gran emoción en los católicos que la veían.
"El argentino es muy devoto de la Virgen, hay personas que no son muy creyentes, pero a la Virgen de la Luján la tienen pegada en el auto. No van a Misa, pero no se pierden la bendición de la patrona de los transportes".
Un libro que busca unir naciones
Las siguientes advocaciones que dibujó fueron la de Nuestra Señora de Guadalupe y de Nuestra Señora de Aparecida. Al ver la positiva reacción que tuvo, decidió hacer un libro con las ilustraciones de las 22 advocaciones de Latinoamérica, agregando, gracias a su espiritualidad franciscana, la flora y fauna más característica del lugar.
En sus ilustraciones, le gusta agregar los símbolos tradicionales del lugar, como la comida y los colores de la bandera, porque busca representar la autenticidad de cada país, pero, al mismo tiempo, la unidad que vivimos los católicos al recibir el amor de nuestra Madre:
"[Me gustaría demostrar] la belleza de nuestra Madre en todos sus colores, las banderas y sus naciones. Yo puedo dibujar a la virgen verde, como lo es Nuestra Señora de Costa Rica, y sigue siendo igual de hermosa que Nuestra Señora de Schoenstatt que es Alemana. La belleza de Latinoamérica es colorida".
Una ilustración vale más que mil palabras
Estas ilustraciones son un recordatorio visible del gran cariño que la virgen tiene por sus hijos. No importa en que lugar sea, ella llegará hasta ahí.
Aunque por el momento se pueden adquirir las estampitas de cada advocación, el siguiente año podremos apreciar las ilustraciones en un libro digital.
"Conocer la historia de distintas advocaciones de la virgen me ha enamorado".
Gaby espera que, así como ella, muchos se enamoren más de las apariciones de la Virgen y puedan esparcir la fe a través de su amor.