5 claves para nutrir tu matrimonio después de los hijos

Todo matrimonio atraviesa por distintas etapas, una de ellas corresponde al momento en que llegan los hijos y la familia se expande; sin duda, este es un momento muy esperado, aunque sabemos que implica cambios para los esposos, desde nuevos hábitos hasta modificaciones en las horas de sueño y mucho más. 

El psicólogo especialista en matrimonios, John Gottman comparte que la llegada de un bebé implica cambios en los matrimonios tales como la disminución de la satisfacción marital.

Aproximadamente dos tercios de las parejas experimentan una baja significativa en la satisfacción marital después del nacimiento de su primer hijo. Este descenso puede ser más pronunciado durante los primeros tres años de vida del niño.

Las causas más notorias es el estrés y falta de sueño. A pesar de que estos cambios son inevitables, Gottman y otros especialistas han dado varias recomendaciones para aumentar la satisfacción marital y recordar que la llegada de los hijos no debe verse como algo negativo, sino todo lo contrario. Te compartimos estas claves que te ayudarán a nutrir tu matrimonio.

Gottman enfatiza la importancia de mantener una comunicación abierta y empática. Las parejas que hablan sobre sus sentimientos y preocupaciones de manera constructiva tienden a manejar mejor la transición a la paternidad. 

Además, pueden dedicar tiempo para charlar sobre otros temas y no solo de los hijos, beneficiando así la comunicación.

Hacer un acto de servicio por el otro puede ayudar a aligerar la carga que representa el cuidado de los niños, el hogar y -sobre todo- puede hacer tiempo para tener un espacio para los dos. 

Otro de los consejos de John Gottman es que las parejas continúen priorizando su relación, incluso después de tener hijos. Esto incluye encontrar tiempo para estar juntos a solas, mantener citas regulares y seguir cultivando la intimidad y el romance.

Dedicar tiempo por lo menos una vez a la semana para una cita les ayudará a no dejar de conquistarse

Sabemos que habrá conflictos por los aspectos ya mencionados, por ello es importante reconocer que son ambos contra el problema y no uno contra el otro.

Las parejas que manejan bien los conflictos tienden a tener matrimonios más fuertes. Gottman sugiere que el enfoque no es evitar los conflictos, sino aprender a manejarlos de manera constructiva. El uso de técnicas como la "pausa" durante discusiones acaloradas y la práctica del diálogo respetuoso son esenciales.

Existen diversos programas y talleres para padres, incluyendo los del Instituto Gottman, diseñados particularmente para saber cómo llevar una familia sin olvidarse del sacramento del matrimonio.

Además, puedes acercarte a un terapeuta familiar para recibir la guía que necesitan como esposos y padres. 

Recuerda que a pesar de los desafíos, tener hijos brinda un sentido de propósito y una mayor conexión y unidad en su matrimonio, permitiendo que Dios sea el centro y la guía.