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Según una nota emitida por la cancillería del país centroamericano, las relaciones entre Nicaragua y la Santa Sede quedan suspendidas. El papa Francisco respondió a la pregunta del director de Infobae sobre la opinión de Ortega que considera a los sacerdotes, los obispos y a los papas como "una mafia".
El pontífice --que hizo alusión en la respuesta al obispo Rolando Álvarez encarcelado por Ortega y condenado a 26 años de prisión por cargos absolutamente inventados-- dijo que esas dictaduras (no solamente la de Ortega, por cierto) eran comparable a la dictadura comunista de 1917 o a la hitleriana, de 1935.
“Con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige [el país]. Ahí tenemos un obispo preso, un hombre muy serio, muy capaz”, dijo el Papa al director-fundador de Infobae. Y luego habló de "dictaduras groseras" y utilizó el argentinismo de "guarangas" (vulgares).
Ante esta comparación, Ortega reaccionó de inmediato y la cancillería sandinista emitió el siguiente, escueto, comunicado:
"Entre el Estado Vaticano y la República de Nicaragua se ha planteado una suspensión de las Relaciones Diplomáticas".
También, según cables de agencias noticiosas, Ortega mandó cerrar la embajada de Nicaragua ante la Santa Sede misma que solamente tenía una representación (no una embajador, pues desde septiembre de 2021 el dictador nicaragüense canceló el nombramiento de Eliette Ortega Sotomayor).
Con este gesto, Ortega pone fin a 115 años de relaciones diplomáticas entre el país centroamericano y la Santa Sede, y se une a los otros trece países que no tienen relaciones diplomáticas con el Vaticano: Vietnam, Corea del Norte, China y Laso (del lado de los comunistas); Somalia, Mauritania, Maldivas, Islas Comores, Brunéi, Afganistán y Arabia Saudí (de la parte musulmana), así como Bután, el reino budista del sur de Asia.
La tensión está puesta, ahora, en la suerte que pueda correr la Iglesia católica en Nicaragua, y en especial el obispo mártir de Matagalpa, encarcelado por Ortega y que, según sus familiares y sacerdotes nicaragüenses en el exilio, no se encuentra en la cárcel "La Modelo" en donde, supuestamente, debería purgar sus "delitos".