La Iglesia católica cree firmemente en la dignidad intrínseca de cada vida humana, desde la concepción hasta la muerte natural. Esta enseñanza permanecerá constante, incluso cuando el mundo trate de eliminar a grupos particulares de personas.
Son necesarias la oración y la acción para favorecer una "cultura de la vida" renovada, que respete a cada individuo viéndolo como un hijo de Dios.
Mira una oración de la misa titulada "Para dar gracias a Dios por el don de la vida humana", que pide a Dios fortalecernos en esta batalla para proteger la vida humana en todas sus etapas:
Oración
Dios, Creador nuestro,
te damos gracias,
a Ti que eres el único que tiene el poder
de insuflar el soplo de vida
cuando nos formas a cada uno de nosotros
en el vientre materno;
te rogamos
que nosotros, a quienes has hecho
custodios de la creación,
podamos permanecer fieles
a este compromiso sagrado
y firme en la salvaguarda
de la dignidad de cada vida humana.
Por nuestro Señor Jesucristo,
tu Hijo, que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo
único Dios, por los siglos de los siglos.