En estos días de celebra la Semana Laudato Si, una iniciativa apoyada por la Santa Sede e impulsada por el Movimiento Católico por el Clima, para sensibilizar a la comunidad católica mundial sobre la importancia de combatir el cambio climático y proteger de sus efectos a las comunidades más pobres del planeta.
Pero los grandes cambios necesitan pequeños pasos y solidas convicciones personales. No sirve de nada intentar que el mundo cambie, si uno no está dispuesto a cambiar su propio estilo de vida y patrones de consumo.
Es la convicción de Domenica Reyes, Gerente de Proyectos de Comunicaciones del Movimiento Católico por el Clima y co presidenta de la iniciativa LaudatoSiGeneration.org. Ella misma vivió una especie de "conversión personal" tras conocer la encíclica Laudato Sí de Papa Francisco, como nos explica en esta entrevista
- ¿Cómo ha cambiado tu vida personalmente tras conocer la Laudato Sí?
Cuando conocí la Laudato Si’ yo estaba en la universidad, y empecé a aprender más a fondo gracias a mi trabajo con el MCMC.
A nivel personal, fue un gran cambio ya que me ayudó a entender que el cuidado de la creación está presente en mi vida como católica, cristiana. Me permitió reflexionar que es una manera de honrar a Dios y sobre todo es un llamado a la justicia.
He realizado cambios en diferentes niveles, por ejemplo he aprendido a tomar tiempo para rezar y contemplar la creación en mi rutina diaria.
También he cambiado un poco mi estilo de vida, hice un pequeño huerto en mi casa, ahora uso solamente mi botella reutilizable, he reducido el uso de plásticos. Trato de mantenerme siempre informada sobre el cambio climático y las noticias de mi país (Ecuador) y a nivel mundial.
También me ha permitido entender que la creación que Dios nos dio es para compartir, no para usarla mal o explotarla.
- ¿Crees que la fe católica debería llevarnos personalmente a un estilo de vida más sostenible?
Yo creo que sí, porque como católicos debemos conectarnos más con nuestros valores de amor y justicia, que es lo lleva el cuidado de la casa común.
A través de nuestra fe, podemos iniciar estilos de vida más sencillos, empezar por dedicar más tiempo a la oración nos ayudará ya que podemos reducir nuestras necesidades de consumo.
Creo que reducir el consumo es un paso muy importante para vivir más sostenible, reducir el consumo de plásticos, alimentos de industrias contaminantes, reducir el consumo eléctrico, etc.
- ¿Qué acciones concretas del día a día podemos poner en marcha?
Iniciar el día con oración, darnos un tiempo para contemplar y agradecer por un nuevo día que Dios nos da, una nueva oportunidad. Otra manera es informarnos, conocer las noticias y todo lo que sucede sobre la crisis climática. Aprender es una manera muy importante de apoyar, porque así podremos involucrar a otros.
También acciones diarias cómo no usar botellas de un solo uso o fundas al salir de compras. Si es posible, cambiar nuestro transporte ya sea caminar o en bicicleta.
- ¿Crees que nuestra alimentación debería ser más "sostenible"?
Si, aunque puede ser difícil, es importante saber de dónde vienen nuestros alimentos, tratar de consumir local y también implementar comidas con más vegetales.
Por ejemplo, en mi casa construí un pequeño huerto, para poder usar de allí algunas plantitas que utilizo en mis comidas.
- Consumir productos sostenibles suele ser más caro. ¿Crees que es una propuesta accesible para familias de clase media o con pocos recursos?
Generalmente, los productos orgánicos o con envoltura reciclada son caros en los supermercados. Sin embargo hay maneras de conseguir productos “sostenibles” de una manera más accesible.
Se puede por ejemplo ir a los pequeños mercados locales. Por ejemplo en mi ciudad aquí en Ecuador hay varios mercados donde los mismos productores venden sus cosechas. Además es una manera de apoyarlos, ya que generalmente los productores o campesinos son personas de bajos recursos.
Otra manera, es impulsar el trabajo comunitario, he visto ejemplos de algunas parroquias que se reúnen algunas veces al mes, y hacen un mercadito con sus productos.
También, otra recomendación es hacer nuestros propios alimentos, en lugar de comprar chips o productos empaquetados, podemos comprar frutas y vegetales en el mercado y hacerlos en casa. Además, es más sano.