Después de celebrar los tiempos de Adviento y Navidad, la Iglesia se centra en el ministerio público de Jesús durante el Tiempo Ordinario.
El Tiempo Ordinario comienza siempre inmediatamente después de la fiesta del Bautismo del Señor. En enero, la Iglesia celebra la fiesta de la Epifanía el 6 de enero y en muchos lugares del mundo esta fiesta se traslada al domingo más próximo.
El Bautismo del Señor se celebra entonces el siguiente domingo disponible, siempre dentro del tiempo de Navidad (en algunos casos, el Bautismo del Señor se celebra el lunes siguiente al domingo de Epifanía).
Lunes ordinario
Esto significa que el primer día oficial del Tiempo Ordinario es el "lunes de la primera semana del Tiempo Ordinario".
La fecha exacta cambia cada año, pero en la mayoría de los casos se produce entre el 10 y el 14 de enero.
Lo interesante es que el primer domingo del Tiempo Ordinario es el 2º domingo del Tiempo Ordinario.
El Tiempo Ordinario continúa como de costumbre, interrumpido por los tiempos de Cuaresma y Pascua, hasta el primer domingo de Adviento.