La noticia del dúo de perros - Eric y Florence- que trabaja en una Abadía ha dado vuelta el mundo desde que se publicó un artículo en la BBC News el 1 de julio del 2024, así como un reportaje televisivo mostrado en BBC Points West el mismo día.
Todo comenzó cuando, en octubre del 2023, la esposa e hija del jefe de los sacristanes Chris Skepper se ausentaron de casa por un período prolongado, dejándolo solo con los dos perros.
Chris, ante esta situación difícil, no se sentía bien de dejar solas a sus mascotas por tanto tiempo, así que decidió pedir permiso a su jefe, Mark Taylor, para traer a Eric y Florence a trabajar con él. Mark accedió a dejarles venir temporalmente durante tres semanas, siempre que se comportaran lo mejor posible.
Eric, de 10 años, y Florence, de 9, fueron muy bien recibidos en la abadía y ganaron tanta popularidad acompañando y recibiendo peregrinos, turistas y fieles que acompañaron a su dueño todos los martes, miércoles, jueves y dos domingos al mes; es decir, las jornadas laborales de su patrón.
De hecho, el mismo nombre de la raza “labrador” indica la índole de estos perros nacidos para acompañar a sus dueños en el trabajo diario.
Eric y Flo ganaron su identificación, colgada a sus cuellos, como “asistentes sacristanes” y ahora saltan contentos del auto de Chris, agitando incesantemente sus colas, alegres de comenzar cada nueva jornada.
Durante los servicios dominicales, incluido el canto de Víspera, se tumban tranquilamente en sus colchonetas, en el pasillo lateral de la iglesia.
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“Son muy tranquilos y amigables. No son perros entrenados para terapia, pero Eric y Florence desempeñan naturalmente ese papel. Suelen tener una presencia tranquilizadora en las personas, los visitantes han encontrado consuelo y alegría simplemente sentándose y acariciándolos”, dijo el señor Skeeper en una entrevista.
Justamente por la cálida bienvenida recibida se les permitió permanecer en servicio permanente. El vicario Nick Davies añadió:
“Como antigua abadía benedictina, la hospitalidad es uno de nuestros valores fundamentales y eso no se limita solo a la humanidad. Todas las criaturas de Dios son bienvenidas en la Abadía de Tewkesbury y ha sido sorprendente ver la enorme respuesta positiva en línea y en persona hacia Eric y Flo. Todo lo que podamos hacer para permitir que más personas experimenten este glorioso espacio y encuentren aquí una oportunidad para la paz, la calma y la reflexión tiene que ser algo bueno”.
La Abadía de Tewkesbury
La antigua abadía de Tewkesbury fue fundada en 1087 para albergar a los monjes benedictinos. Su construcción finalizó alrededor de la primera mitad del siglo XIV.
Tras la “disolución de los monasterios” por parte de Enrique VIII fue parcialmente desmantelada conservándose apenas la antigua iglesia abacial Santa María Virgen, que fue vendida a los feligreses por 453 libras.
Los cambios realizados desde entonces en la configuración interna han evolucionado para reflejar los estilos contemporáneos de devoción, actualmente es de estilo anglo católica.
La Abadía es famosa por las vidrieras medievales de sus siete ventanas de coro y su grandiosa colección de vidrieras victorianas, así como algunos excelentes ejemplos modernos.
Las más recientes fueron creadas por Tom Denny para celebrar el 900 aniversario de la llegada de los monjes a la abadía, y su tema es el lema benedictino "Ora y trabaja".
La arquitectura, normanda de su exterior, la coloca entre las más fascinantes de Gran Bretaña y alberga la torre románica más grande de Europa.
La abadía también es famosa por haber sido refugio durante la Guerra de las Rosas, antes de ser re consagrada por sus campanas y su torre, y por albergar tumbas y monumentos conmemorativos de la aristocracia local.
