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La canonización de 'Mama Antula' -María Antonia De Paz y Figueroa, por su nombre civil- tendrá lugar el 11 de febrero de 2024, VI Domingo del Tiempo Ordinario y aniversario de la primera aparición de la Virgen María en Lourdes, anunció el Dicasterio para las Causas de los Santos en un comunicado difundido el 16 de diciembre de 2023. Esta laica consagrada argentina, nacida en 1730 y fallecida en 1799, contribuyó a la difusión de los Ejercicios Espirituales en Argentina.
Tras un año 2023 sin canonizaciones, está previsto por tanto un primer rito de canonización en 2024, relativo a una figura argentina. El Vaticano no ha especificado dónde tendrá lugar la canonización, pero lo más probable es que la ceremonia se celebre en Roma y no en Argentina, aunque está prevista una visita del Papa Francisco el año que viene.
El Papa Francisco, que ya ha sido invitado formalmente por el episcopado local, recibirá también una invitación de las autoridades civiles. El nuevo presidente, Javier Milei, podría reunirse con el Papa Francisco durante una gira internacional que, según la prensa argentina, debería llevarle a Roma, Ucrania e Israel a principios de año. Su posible presencia personal en la canonización del 11 de febrero marcaría un signo de acercamiento entre el líder populista y la Iglesia, tras una campaña presidencial muy agresiva durante la cual insultó copiosamente al Papa Francisco.
Espiritualidad ignaciana
Mama Antula es una figura popular en Sudamérica, donde ayudó a mantener viva la espiritualidad de san Ignacio de Loyola a pesar de la expulsión de los jesuitas exigida por el Rey de España, cuyo país ejercía entonces el control colonial sobre estos vastos territorios.
En la segunda mitad del siglo XVIII, Mama Antula recorrió los desiertos del Tucumán vistiendo el hábito negro de los jesuitas. A veces encontró la hostilidad de la población local, que la acusaba de loca y bruja.
Pero perseveró, organizando retiros espirituales inspirados en los Ejercicios de san Ignacio, primero en pequeños pueblos y luego, a partir de 1779, en Buenos Aires, donde el obispo de la época acabó por hacerlos obligatorios para todos los aspirantes a las órdenes sagradas.
Por la casa de ejercicios espirituales que fundó en Buenos Aires pasaron más de 70 mil personas durante los últimos veinte años de su vida, entre ellas importantes personalidades políticas que más tarde desempeñarían un papel clave en la independencia de Argentina.
Su causa de beatificación se abrió en 1905, a petición de los obispos argentinos de la época. Tras más de un siglo de trámites, un milagro atribuido a su intercesión -la curación de una monja a principios del siglo XX- fue reconocido formalmente por el Papa Francisco en marzo de 2016. Fue beatificada el 27 de agosto de 2016 en una Misa celebrada en Santiago del Estero, en el norte de Argentina, por el cardenal Angelo Amato, entonces prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.
Para su canonización se eligió como milagro válido el caso de un hombre que sufrió un grave derrame cerebral. El argentino, nacido en 1959, estaba hospitalizado en Santa Fe y pudo volver a hacer vida normal, aunque su pronóstico vital se había visto comprometido por un daño cerebral que se consideraba irreparable. Se formó una cadena de oración para pedir por su recuperación, en la que participaron no solo sus familiares y amigos, sino también personas que no lo conocían y que pidieron la intercesión de Mama Antula en su favor.
Beatificación del Cardenal Pironio
Otra importante figura argentina, más reciente, fue beatificada el 16 de diciembre. Se trata del cardenal Eduardo Pironio (1920-1998), que fue Presidente del Consejo Pontificio para los Laicos de 1984 a 1996, bajo el pontificado de Juan Pablo II. Como tal, fue uno de los fundadores de la Jornada Mundial de la Juventud. El Papa Francisco, que lo consideraba uno de sus pocos verdaderos amigos en la Curia Romana, reconoció sus virtudes heroicas el 18 de febrero de 2022.
La Misa de beatificación será celebrada en el santuario de Luján por el cardenal español Fernando Vérgez Alzaga, actual presidente del Governatorato del Estado de la Ciudad del Vaticano, que fue secretario personal del cardenal Pironio.