Cuando sientes confusión, desde tu interior, que quizás te parezca un caos, "levanta" tu mirada.
Aunque no sepas lo que el Señor quiere de ti en este instante, ¡ora!
Con confianza en su plan amoroso y en Él, tu Padre creador, ¡reza!
Con sinceridad, en la tormenta, clama a Jesús, que te espera para abrazarte, calmarte y comunicarte su paz.
Hazlo con esta sincera oración de la escritora italiana Stefania Perna, recogida en su libro 50 preghiere per i cercatori di speranza.
Oración
Señor, no te entiendo.
Muchas veces me pasa, Señor,
que quiero entender aspectos de mi vida
y de mi relación contigo,
engañándome siempre cada vez más.
Explicaciones que me confunden.
Frases que me ponen nervioso.
Y todo eso me aleja de ti y de los demás.
¿Es este mi camino hacia ti?
¿Qué sentido tiene esta agitación en mi corazón?
Y te repito con Pedro:
"¿No te importa que me hunda?".
Quizás eres Tú quien que quiere empujarme,
a que dependa solo de ti.
a confiarte "verdaderamente"
la brújula de mis pensamientos "inquietos".
¡Pero tengo poca fe!
¿Hasta cuándo?
Al menos en este momento
trataré de repetir con el corazón:
"¿Hasta cuándo mi alma estará acongojada y
habrá pesar en mi corazón, día tras día?...
¡Mírame, respóndeme, Señor, Dios mío!".
"La paz esté con ustedes"…
"¿Por qué están turbados y se les presentan esas dudas?"
Tú
Al menos en este momento
voy a creer con todas mis fuerzas en tus palabras.
Al menos en este momento estaré seguro,
"sea lo que sea lo que me reproche mi corazón,
¡Recordaré que Tú eres magnánimo!
