“Me da mucha tristeza que la dictadura haya obligado a las hermanas Misioneras de la Caridad de Teresa de Calcuta a abandonar el país”, había dicho recientemente el obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio José Báez, desde su exilio en Miami.
Las palabras del obispo nicaragüense llegaron luego de que trascendiera que el régimen de Daniel Ortega cerrara sus obras benéficas en el país centroamericano y fueran notificadas de abandonar el país, tal cual adelantó Aleteia.
“Nada justifica privar a los pobres de atención caritativa. Soy testigo del servicio amoroso que prestaban las hermanas. Dios las bendiga”, agregó Báez a través de su cuenta de Twitter.
No solo expulsión, también “asedio”
La noticia de la salida de las Misioneras de la Caridad de Nicaragua, organización benéfica fundada por Madre Teresa de Calcuta (quien incluso llegó a visitar el país allá por 1986) incluida dentro de una lista de más de 100 asociaciones y fundaciones ilegalizadas, rompió fronteras.
Sin embargo, mientras esto acontecía y las religiosas se preparaban para dejar el país, medios como El Confidencial informaron que un dispositivo policial se mantenía este 29 y 30 de junio en los accesos al Hogar Inmaculado Corazón de María en Granada. En ese lugar permanecían aún seis de las misioneras.
“El asedio policial se mantuvo toda la tarde (en referencia al día 29), después que el Parlamento, dominado por el Frente Sandinista, oficializó la cancelación de la personería jurídica de la congregación religiosa”, indicó El Confidencial.
¿Tienen un plazo para salir del país?
Por otra parte, el propio medio de comunicación local reprodujo un diálogo telefónico que mantuvo con una de las religiosas en el hogar vigilado por el régimen de Daniel Ortega. En esa conversación la religiosa confirmó que sus obras de beneficencia estaban cerradas, que aún permanecían en el país, aunque sin saber por cuánto tiempo.
“Nosotros hasta que inmigración nos avise para ver si podemos salir”. “Todavía estamos aquí. Todavía no han llegado del Gobierno”, dijo en ese momento la religiosa al ser consultada sobre el plazo de salida.
«“No sabemos nada, solamente sabemos que tenemos que ir, pero no sabemos cuándo, cómo, nada. Pienso que ellos nos van avisar- en referencia el Migob (Ministerio de Gobernación) -”, respondió la religiosa, y pidió que rezaran por todas las misioneras», prosiguió el El Confidencial al hacer referencia al escueto diálogo con una de las religiosas de Madre Teresa de Calcuta.
En tanto, en horas de definiciones con respecto a esta expulsión de religiosas de Nicaragua, lo sucedido confirma la larga lista de acciones de hostigamiento de parte del régimen de Daniel Ortega hacia la Iglesia.