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Recetas del convento: Nido de patatas con bechamel de los cistercienses

POTATO
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María Eugenia Brun - publicado el 25/01/22
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Una receta de la comunidad de monjes cistercienses del Monasterio de Santa María de Huerta en Soria (España).

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Estos monjes llevan una vida consagrada y pertenecen a la Orden Cisterciense de la Estrecha Observancia (ORCS), seguidores de la espiritualidad de San Benito.

Los orígenes de esta comunidad datan de 1150, y en 1882 el monasterio fue declarado monumento nacional.

Una de sus bellezas es el refectorio de 1215, de estilo gótico del S. XIII, único en todo el mundo dentro del arte cisterciense por todas sus características. El mismo se comunica con una cocina gótica también del S. XIII al estilo de las cocinas cistercienses españolas.

Después de la exclaustración de 1835, fueron llegando nuevos monjes a Huerta en 1930. Durante la guerra civil, el lugar fue utilizado como campo de prisioneros.

Actualmente este monasterio cuenta con un hospedaje y se realizan visitas turísticas en la planta baja. Es la parte más antigua y artística, se podrán visitar la iglesia, dos claustros y las dependencias del monasterio.

Además como modo de subsistencia son especialistas en mermeladas, tienen 32 variedades de mermeladas, 16 con sabores tradicionales (como fresa o manzana) y otras 16 peculiares que son de cerezas con orujo, o naranja con chocolate, entre otras.

Puedes visitar su página web para comprar mermeladas o visitar su hospedaje aquí:

Nido de patatas con bechamel

POTATO

Ingredientes:

    Preparación:

      Valor nutricional

      Se trata de una preparación sencilla, con ingredientes económicos y nutritiva. Es ideal para toda la familia ya sea un almuerzo o una cena. Incluso es práctico para llevar como vianda al trabajo o al colegio.

      Por un lado, las patatas nos aportan la energía que necesita nuestro cuerpo en forma de carbohidratos, mientras que el atún y el huevo son la fuente proteica de la preparación. Por otro lado, tenemos la fibra que nos brindan los vegetales, en este caso los pimientos y la cebolla.

      Acompañamos con un vaso de agua fresca, o saborizada sin azúcar, luego una fruta fresca y ¡listo ya tenemos una comida nutritiva y saludable!

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