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José Ayol, un joven oriundo de Guamote, Chimborazo, se transformó en noticia hace unos meses. Esto luego de que fuera reportado en una primera instancia como desaparecido y posteriormente encontrado en zona fronteriza entre México y Estados Unidos.
“No tengo más detalles, aún no hemos podido hablar con él, sabemos que está bien”, dijo la esposa de este joven de 24 años luego que se confirmara el hallazgo (ver El Comercio 5/7/2021).
Su caso, como el de tantos otros, motivó en ese momento volver a hablar sobre el drama de los migrantes, las amenazas de los “coyotes” (personas que favorecen el ingreso ilegal de inmigrantes), además del anhelo de buscar soluciones para dar respuesta al anhelo de tantos.
Sin embargo, en los últimos días el tema migratorio volvió a ser tema de conversación en Ecuador a raíz de la exigencia de México una visa (medida suprimida en noviembre de 2018) que regirá desde este sábado 4 de septiembre.
Esta situación motivó una desesperada carrera por tratar de ingresar a México antes de esa exigencia a través de la obtención de pasaportes. En localidades como Cuenca, informa El Comercio, decenas de niños, jóvenes y adultos esperan acceder en estas horas al documento oficial antes que las medidas sean más rigurosas.
De fondo aparece el sueño de miles de migrantes que utilizan a México como puente para llegar a Estados Unidos a través de vías irregulares, con todo lo que ello implica (exposición al tráfico de personas, entre otras amenazas).
Mientras esto acontece, y con reportes en estas horas que dan cuenta de más de un centenar de ecuatorianos que viajaron a México como turistas que están retenidos en un aeropuerto, la migración sigue a paso firme. Según datos del gobierno, tan solo en julio se incrementó el número de personas con destino al país norteamericano (más de 22.000 personas), de las cuales poco más de 500 regresaron.
