separateurCreated with Sketch.

Rezar con los salmos: ¡Dios es tu refugio y fortaleza!

whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Claudia Soberón - publicado el 16/03/21
whatsappfacebooktwitter-xemailnative

Sabemos por experiencia que Dios está siempre y en cada momento. ¿Qué padre abandona a su hijo ante cualquier circunstancia, por dura que sea?

Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.


Deseo donar en 3 clics

Rezar con los salmos es una guía semanal que te ofrecemos para meditar sobre la Palabra de Dios. Hoy te presentamos el Salmo 46 (45).

Este salmo describe una fuerte crisis del salmista. Sin embargo, su mirada está firmemente puesta en la providencia de Dios. Sabe, por su fe, que Él es su amparo y fortaleza. Esta confianza no proviene de su interior, sino de una fe que solo Dios le ha dado.

Es un salmo que fue escrito en un momento muy duro y doloroso. Por eso resulta todavía más impactante la serena forma en que se plasma la fe de quien escribe. Él sabe que Dios es providente, misericordioso, generoso, bueno, y confía. Dios le ha hecho saber al pueblo que nunca lo abandonará.

Nuestro refugio y baluarte

¿Acaso no hemos tenido semejantes experiencias? ¿Acaso no hemos pasado por crisis y momentos francamente duros?

Los seres humanos pasamos por un sin fin de experiencias. Sin embargo, por la fe que se nos ha dado, sabemos que Dios está siempre y en cada momento. ¿Qué padre abandona a su hijo ante cualquier circunstancia, por dura que sea? Este salmo es una buena oportunidad para reafirmar nuestra confianza y depositar serenamente en Él nuestra vida, con lo bueno y con lo malo. Sabiendo que Él está sujetándonos todo el tiempo. Basta creerlo.

¿No es justo, quizá, alabar a ese Padre Bueno con nuestra fe y confianza? Nuestro refugio y baluarte es Él, no tengamos miedo y no desesperemos.

Salmo 46(45),2-3.5-6.8-9

Dios es nuestro refugio y fortaleza,
una ayuda siempre pronta en los peligros.
Por eso no tememos,
aunque la tierra se conmueva

y las montañas se desplomen
hasta el fondo del mar.
Los canales del Río alegran la Ciudad de Dios,
la más santa Morada del Altísimo.

Dios está en medio de ella: nunca vacilará;
él la socorrerá al despuntar la aurora.
El Señor de los ejércitos está con nosotros,
nuestro baluarte es el Dios de Jacob.

Vengan a contemplar las obras del Señor,
él hace cosas admirables en la tierra.

Texto bíblico: Libreria Editrice Vaticana


ROAD
Te puede interesar:
Rezar con los salmos: El Señor te muestra el camino, ¡síguelo!

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Aleteia vive gracias a sus donaciones

Permítenos continuar nuestra misión de compartir información cristiana y bellas historias apoyándonos.