Desde su convento de clausura nos revelan sus recetas y evangelizan a través de Canal Cocina. Ellas son las presentadoras de los programas de televisión: Divinos pucheros, donde realizan exquisitos guisos y panes, y Bocaditos de cielo, en el que nos deleitan con sus antiguos y sencillos dulces.
Además, a través de estos programas nos invitan a conocer más acerca de la vida contemplativa. Por ejemplo, en uno de ellos cuentan cómo viven la Cuaresma en el convento y nos dan algunos consejos para vivirla de la mejor manera.
Receta del pan de miel
Ingredientes:
300 mililitros de leche de soja.
50 gramos de mantequilla.
50 gramos de miel.
1 pizca de sal.
30 gramos de levadura prensada (fresca).
500 gramos de harina integral.
20 gramos de semillas de amapola.
Huevo para barnizar los panecillos.
Preparación:
Lo primero que hacemos es poner en un bol la harina, la mantequilla, la miel, la leche de soja y la sal. Amasamos el conjunto con las manos.
Posteriormente, añadimos la levadura y las semillas de amapola. Continuamos amasando.
Damos forma a los panecillos, aplastamos y colocamos sobre la bandeja de horno.
Se deja reposando -tapado con un paño- 30 minutos.
Pasada la media hora, antes de meter en el horno barnizamos los panecillos con huevo batido mezclado con un poco de miel.
Cocemos en el horno a 200 º C durante 15 minutos.
Ya tenemos listo el pan de miel.
Podes ver la receta paso a paso clicando aquí.
Valor nutricional
En esta receta se utiliza harina integral. La harina 100% integral preserva mejor los nutrientes y contiene 5 veces más fibra que la harina refinada, por lo que tiene un menor impacto en la glicemia (siendo de un índice glucémico moderado). Al tener más fibra también ralentiza la absorción y son más saciantes.
Las semillas de amapola, son bien pequeñas, negras y al igual que otras semillas son fuente de proteínas vegetales y grasas principalmente insaturadas es decir de buena calidad nutricional. Tienen un alto contenido en fibra siendo por lo tanto recomendadas para combatir el estreñimiento.
Además es rica en polifenoles, antioxidantes, potasio y esteroles que ayudan a reducir el colesterol, siendo también beneficiosa en la prevención de enfermedades entre ellas la cardiovasculares.
En esta receta la técnica culinaria utilizada es el horno, es una técnica saludable, al hornear un alimento se lo somete al calor que se transmite por radiación y convección a una temperatura elevada (200ºC),.
Cuando se hornea pan, como en este caso, aumenta el contenido en vitamina B de este alimento, esto se debe a la acción fermentativa de las levaduras con las que se elabora el pan.
Otro de los ingredientes de esta preparación es la miel, uno de los endulzantes más antiguos. Sabemos incluso que era consumido por santos: por ejemplo, en el Evangelio según san Mateo describe el día a día de San Juan el Bautista “Juan tenía una túnica de pelos de camello y un cinturón de cuero, y se alimentaba con langostas y miel silvestre”.
La miel pura, cruda es la más recomendable porque es un alimento que conserva todas sus propiedades intactas, debido a que no ha sufrido ningún proceso de transformación (pasteurización, filtración) desde que se recolecta del panal hasta que se envasa para su consumo, no así con la miel procesada.
A pesar de sus beneficios, la miel no deja de ser un endulzante al igual que el azúcar, por lo que no es aconsejable su uso en aquellas personas que presenten diabetes, pero pueden sustituirla en la receta por algún edulcorante apto para horno.
Consejos de las hermanas
La Cuaresma es un tiempo de penitencia, de preparación para la Pascua, la Resurrección del Señor. Por eso todos los cristianos tenemos que orar mucho más, hacer penitencia y ayuno el Miércoles de cenizas y los viernes de Cuaresma, y es un momento de escuchar con más asiduidad la palabra de Dios.
¿Cómo viven las hermanas la Cuaresma en el convento?
Cuentan que no suenan las campanas, está prohibido tocar instrumentos musicales con mucho bombo y solo se puede tocar alguno para que acompañe el canto. El canto de entrada debe indicar que estamos en Cuaresma y no cantan el Aleluya durante toda la cuaresma recién en Pascua. Además, no se ponen flores hasta el cuarto Domingo de Cuaresma cuando se acerca la Pascua.
El domingo de Pascua de tarde tienen la misa y en la mañana hacen una procesión. La mitad de las monjas van por un lado a la galería con la virgen tapada con el manto negro y por el otro lado las otras religiosas llevan al niño Jesús, cuando llegan ambos, le quitan el manto negro a la virgen y hacen tres bendiciones a Jesús resucitado.