Estanislao Dowlaszewics Bilman, obispo auxiliar de Santa Cruz, y una distinción cargada de emoción a poco tiempo de haber superado el coronavirus “Un camba polaco”. Así se siente monseñor Estanislao Dowlaszewicz Bilman, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santa Cruz. Es que este obispo de origen polaco fue nombrado recientemente “Hijo Ilustre de Santa Cruz de la Sierra en Bolivia”. Sin duda un reconocimiento que hace honor a un hombre que ha echado raíces en una tierra a la cual llegó hace más de 30 años.
Estanislao llegó a la localidad de Montero como misionero franciscano en 1986 y desde ese momento su trayectoria ha sido por demás fructífera. Pero los desafíos no han sido para nada menores, pues sucedió en un momento en que no hablaba ni entendía para nada el idioma castellano, recuerda un artículo publicado por la Arquidiócesis de Santa Cruz.
Los años pasaron y como sacerdote también se desempeñó como párroco de Nuestra Señora de las Mercedes.
“Siento el derecho de ser de ‘pura cepa’. Que mi paso por estos llanos orientales, no fue un ‘fuego de chala’ sino un fuego de ‘jenecherú”, expresó este 26 de febrero durante la conmemoración de un nuevo aniversario de Santa Cruz y su designación como “Hijo Ilustre”.
“De caldera del Diablo a templo de Dios”
El 13 de marzo de 2001 fue consagrado obispo auxiliar de Santa Cruz. Su nombramiento estuvo a cargo del papa Juan Pablo II en diciembre de 2000. Pero aquello sucedió en un lugar un tanto especial, pues se dio en un estadio de fútbol de nombre Gilberto Prada, sitio con un sobrenombre especial y que fue contado de esta manera por el obispo:
“La caldera del diablo, se ha convertido en un templo de Dios”.
La celebración estuvo acompañada de muchos fieles, instancia de sentimientos encontrados entre sus allegados, por un lado la alegría de su consagración, pero por otro la tristeza por el cambio de funciones.
“La dignidad humana”
Pero el pasado 26 de febrero Estanislao ofreció unas palabras cargadas de reflexión sobre el tema de la dignidad humana. A continuación un breve pasaje de su alocución al momento de haber recibido la distinción:
“No es suficiente nacer como humanos, todavía necesitamos ser humanos, actuar pensar y desear como humanos, mantener la dignidad es vivir en armonía con la conciencia y la verdad, es vivir sin hipocresías, la solidaridad de todos en este tiempo tan difícil de pandemia (…)”, indicó.
Venció al coronavirus
Pero en los últimos días no solamente conmocionó a nivel público su nombramiento, sino también el hecho de haber superado el coronavirus. Esto motivó, tanto a él como a monseñor René Leigue, a escribir una emotiva misiva con palabras llenas de agradecimiento por la cercanía y las oraciones.
“Damos gracias a Dios por el gran regalo de amistad que se nos está dando personalmente a través de tantos grupos de oración, como Apostolado María Reina de la Paz, Movimiento Apostólico Señor de la Divina Misericordia, que han hecho su misión: rezar en este tiempo de pandemia por los Pastores y sus sacerdotes enfermos. Gracias por haber podido experimentar tanta amistad estos días”, indican.
“Nos gustaría agradecer a todos por las palabras de bondad y oraciones enviadas por nuestra rápida curación. Para toda persona que de repente tiene que aislarse del mundo, cada acto de apoyo es importante, porque ayuda a recordar que no está solo. En estos días, vemos que cada vez hay más personas infectadas por el coronavirus”, agregan.
He aquí algunas pinceladas de un obispo polaco, con corazón en Santa Cruz, desde ahora también “Hijo Ilustre” y también testimonio de oración y paz contra el coronavirus.
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