Doce testimonios que te conmoveránFue pre-estrenada en Buenos Aires la película Human Life, del director Gustavo Brinholi. Co-producción ítalo-brasileña, este documental presenta a lo largo de poco más de una hora una docena de testimonios que ponen de manifiesto cómo la vida, en ocasiones frágiles, jamás pierde su esplendor si la acompaña la esperanza.
Con una fotografía y música bellísimas, ésta última a cargo del propio Brinholi, el documental recoge testimonios de vida en Italia, Estados Unidos, Austria y Brasil. Pese a la diversidad de historias y geografías, de contextos y necesidades, un patrón común sobrevuela cada uno de ellos: los inesperados desafíos que se presentan en la vida de sus protagonistas, en muchos casos llenos de dolor, pero que acaban por reivindicar lo que el subtítulo del film proclama, que la vida siempre vale la pena.
Vale la pena navegarla como el surfista brasilero que perdió sus manos o el joven tetrapléjico que renació en la pintura y se anima a enfrentar y contemplar las mismas olas que le hicieron, paradójicamente, redescubrir su potencial. Vale la pena en los vaivenes que la sobreviviente de concentración tuvo que enfrentar para reencontrarse con su familia. O el desafío de ayudar a otros padres como los de la niña con síndrome de down austríaca, o el del empresario que convierte su fábrica de quesos en un espacio de promoción de la vida y la familia pese a las licencias por maternidad que se le presentan, entre otros. Pero particularmente dos testimonios llevan el hilo conductor.
Por un lado, el de la deportista brasileña Ana Paula Henkel, medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 con la selección de vóley, luego representante de su país en la modalidad vóley de playa. Ana Paula da cuenta de sus años acompañando a mujeres que expresaban la voluntad de querer abortar, incluso, como uno de los momentos más dramáticos del film presenta, antes que ver crecer a sus hijos en otros hogares.
Por el otro, el de la magnánima obra de Tonio de Mello, fundador de la Comunidad Católica de Jesus Menino (bebé). Tonio adoptó a lo largo de su vida a 42 niños con distintos tipos de discapacidades, varios de ellos producto de intentos de aborto de parte de sus madres. A 50 kilómetros de Río de Janeiro, en una situación absolutamente adversa y sin recursos aparentes, la comunidad de Jesus Menino se erige como uno de los más maravillosos páramos de esperanza y muestra que el amor arranca sonrisas aún a niños sin actividad cerebral aparente.
Insertada entre los testimonios asoma la aguda reflexión ante el aborto del filósofo Olavo de Carvalho, basada en su artículo “Lógica del aborto”, una lúcida e innovadora mirada desde una perspectiva moral, más allá de lo que la ciencia pueda decir y la disponibilidad a escuchar de quienes debaten. Es una lectura de la cuestión que, como la película, invita a contemplar lo incomprensible.
En la vida cotidiana, situaciones como las vividas por los protagonistas de Human Life llevan a callejones sin salida en los que no parece haber explicaciones posibles y el “Por qué” no encuentra respuesta. Pero Brinholi logra en su edición llevar paz a través de una serena contemplación de la vida, que aún en toda su fragilidad, puede ser esplendorosa.
Para más información de Human Life, visitar https://www.humanlifemovie.com/ .