También China ha utilizado miles de cuentas en Facebook y Twitter para desinformar de las protestas de Hong Kong
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
El servicio de inteligencia de China está siendo problemático en los países occidentales, porque funcionarios chinos lo tienen difícil espiar en occidente. Espías chinos los hay, pero su raza los pone en evidencia de modo inequívoco. Por ello la inteligencia china ha decidido reclutar espías entre los países occidentales, con cara de europeos o norteamericanos.
¿Cómo lo hace? Buscando profesionales en LinkedIn, la red social profesional por excelencia, que también existe en China. Así lo han descubierto los servicios de inteligencia y de contraespionaje occidentales, principalmente de los Estados Unidos, Alemania, Gran Bretaña y Francia, contactando con miles de usuarios chinos, casi siempre con cuentas falsas, informa el New York Times. No se sabe a cuántos espías habrá reclutado Pekín hasta ahora ñor este procedimiento.
LinkedIn es propiedad de Microsoft y tiene 645 millones de usuarios en busca de oportunidades laborales. Es una gran plataforma para captar profesionales y ex funcionarios de las administraciones y reclutarlos para el servicio de inteligencia de China.
Uno de los casos descubiertos, entre otros muchos, es el de un hombre que se hace llamar Robinson Zhang, empleado de la empresa R&C Capital, con sede en Hong Kong, dedicada a “inversión global, cuestiones geopolíticas, políticas públicas, etcétera”. Este envía invitaciones de amistad, proponiendo viajes a China y buenos salarios. Así pueden reclutar personas pertenecientes a las élites políticas, académicas y empresariales.
Decía el anuncio que la empresa estaba en el edificio Empire Center, en el número 68 de Mody Road de Hong Kong. Resultó que la empresa no existía, ni en este edificio ni en ningún otro. Y el tal señor Zhang era un nombre inventado.
Otro caso es el del funcionario danés Parello-Plesner, que contactó por Linkedln con una usuaria china de nombre Grace Woo, como representante de la empresa cazatalentos DRHR de Hangzhou (China). Una vez, el funcionario danés se encontró en Pekín y se le invitó a Hangzhou, pero dijo que prefería ver a Grace Woo en su hotel de Pekín. No se presentó. Fueron otros dos, que no tenían tarjeta de presentación. Intuyó que eran del servicio de inteligencia. Se lo dijo a los ingleses, donde trabajaba y se descubrió todo.
Los servicios de inteligencia alemanes acusaron a la cazatalentos china DRHR de intentar contactar con 10.000 alemanes a través de Linkedln, donde figuraban DRHR y Grace Woo.
Recientemente, el ex empleado de la CIA, Kevin Patrick Mallory, fue condenado a 20 años por espionaje en favor de China. Su relación con china empezó en Linkedln. También se acusó a un agente chino, Yanjun Xu, de reclutar a un ingeniero de GE Aviation, en una relación que comenzó en Linkedln.
La portavoz de LinkedIn, Nicole Leverich, declaró al rotativo norteamericano que su empresa elimina las cuentas falsas “de forma preventiva”. “Hacemos cumplir nuestras políticas, las cuales son muy claras: la creación de una cuenta falsa o una actividad fraudulenta que busque engañar o mentir a nuestros miembros es una violación de nuestros términos de servicio”, explicó.
A raíz de estos hallazgos y otros más, los servicios de inteligencia y contraespionaje occidentales detectaron y cerraron miles de cuentas de Facebook, Twitter y otras redes sociales que se dedicaban a la contrainformación relacionada con las protestas de Hong Kong. Eran cuentas de China. Un caso parecido a como Rusia utilizó las redes sociales para desinformar en varios casos como el referéndum del brexit británico y las elecciones presidenciales norteamericanas.