Agradecen al Cura Brochero (el viejo de la bolsa) por el niño encontrado a salvo en el desiertoEn la historia ya se destacaba la inmensa solidaridad de un pueblo entero en la búsqueda de un niño perdido, pero faltaba algo para dar cuenta de la supervivencia de Benjamín, de 5 años, en el desierto de San Juan.
Desde El Salado, donde se encontraba con su familia la última vez que lo vieron, 21 kilómetros se desplazó este niño perdido en Albardón, a la intemperie, con altas temperaturas y expuesto a la fauna salvaje. 22 horas estuvo solo hasta que fue hallado con leves signos de deshidratación.
Más de 1500 personas, entre fuerzas de seguridad y voluntarios participaron en su búsqueda, tanto a pie como a caballo, en motocicleta y cuatriciclo. El conocimiento de la zona por parte de baqueanos y también motociclistas, la zona del hallazgo fue parte de pasadas ediciones de la competencia Dakar, fue clave para dar con él.
La sorpresa médica fue mayúscula al ver el buen estado del niño, incluso mientras era desplazado hasta el Hospital en helicóptero. En esos primeros contactos Benjamín dijo que fue cuidado por “el viejo de la bolsa”. Así lo relató su hermana Victoria a canales de televisión, que al reencontrarse con ellos les dijo que “al final al final el viejo de la bolsa no era tan malo”.
Como relató su hermana, para instarlo a dormir la familia solía referirse a esta figura popular. Pero pronto en redes sociales, e incluso en voz de quienes lo buscaron y de su propia familia, el viejo de la bolsa, el bueno, fue asociado con San José Gabriel del Rosario Brochero, el Cura Brochero.
“Nosotros pensamos que fue el curita quien lo protegió, de hecho estábamos rezándole a él antes de que apareciera y después vinieron a darnos la noticia, por eso ahora tenemos que ir a verlo para agradecerle”, expresó su hermana Guadalupe, en declaraciones recogidas por El Tribuno.
Alberto “Puchi” Ontiveros, piloto que participó en la búsqueda e instó a que se busque donde el niño fue encontrado, también cree que fue el primer santo argentino quien cuidó del niño, tal como ha expresado en distintos medios.
Además, en la zona en la que fue hallado se encuentra una capilla dedicada al Cura Gaucho con un estilo arquitectónico bien “brocheriano”, rodeada de maleza, prácticamente, en el medio de la nada. La capilla fue erigida con restos de construcciones derribadas durante un terremoto hace ya algunos años, y desde entonces en punto de peregrinaje.
Por dos días, sin embargo, el hallazgo de Benjamín no coincidió con la fecha de la Festividad del Cura Brochero. Sin embargo, pocos dudan de que ese viejo de la bolsa sea otro que el gaucho más famoso de estos pagos.